En Dinamarca no es delito permitir que una enferma se deje morir de inanición
La policía de la localidad danesa de Aalborg no presentará cargos contra los responsables de la muerte de una mujer paralítica de 58 años que se negó a ingerir ningún alimento hasta morir de inanición en una clínica de esta ciudad.Tras revisar el informe del médico responsable del distrito y las circunstancias de la muerte de la paciente la pasada primavera, la policía estima que "no hubo acción delictiva", informó el inspector Joergen Ilum, de la policía de Aalborg.
La mujer, paralítica del cuello hacia abajo y con una enfermedad incurable que "le producía fuertes dolores", se negó a comer durante su estancia en la clínica de reposo de la capital de Jutlandia, deseo que fue aceptado por los médicos y el personal del establecimiento.
La investigación demostró que "la única forma de suicidio" al alcance de la enferma era negarse a comer y beber", y llegó a la conclusión de que alimentar a la fuerza a un adulto con todas sus facultades mentales sería "una violación de los deseos de la paciente, que quería poner fin a sus sufrimientos, a lo que cualquiera tiene derecho".
Nueva legislación
El informe de la policía asegura que "nadie ayudó a la enferma a morir", de lo que se deduce que el hecho "no constituye delito ante la ley danesa".Las conclusiones de este informe policial se llevarán al Parlamento danés, donde en la actualidad se discute una legislación más específica sobre la eutanasia, y concretamente sobre la ayuda activa a morir.
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