Pastor lamenta las trabas que sufre la campaña del Mediterráneo

El coordinador de la campaña de defensa del Mediterráneo de la organización ecologista Greenpeace, Xavier Pastor, declaró ayer que los retrasos que las autoridades de Marina imponen al barco Greenpeace 5, "no son tan inocentes, porque perjudican la estrategia de la campaña, nos ocasionan gastos económicos y afectan a la imagen de Greenpeace".

El motovelero Greenpeace 5 tuvo que regresar el domingo al puerto de Barcelona por órdenes de la comandancia de Marina de las islas Baleares, para actualizar una parte de la documentación de navegación.

Xavier Pastor dijo que el Greenpeace 5 piensa continuar con la campaña una vez obtenga el permiso para abandonar el puerto. "Ya habíamos explicado que este año, por la escasez de medios, no podríamos hacer una campaña espectacular, pero hechos como éste la reducen aún más", explicó Pastor.

El Greenpeace 5 se encontraba en Palma de Mallorca cuando recibió la orden de regresar a Barcelona para poner en regla unos documentos cuya falta de vigencia afectaba a la seguridad del barco. "Nos parece una incongruencia que nos digan que carecemos de medidas de seguridad suficientes para hacer navegaciones largas y que, al mismo tiempo, nos hagan regresar desde Palma hasta Barcelona", declaró Pastor.

La comandancia alegaba que el Greenpeace 5 no tenía actualizada la "tablilla de desvíos", que sirve para corregir el rumbo marcado por las brújulas, y que el Greenpeace 5 estaba clasificado como un barco sólo apto para navegar por aguas abrigadas, por lo que si quería hacer navegaciones largas era preciso comprobar su equipo de seguridad y, en el caso de que fuera suficiente, cambiar la clasificación del buque.

Según Xavier Pastor, estos dos problemas podrían haberse solucionado en Palma. Fuentes de la comandancia declararon que procurarían resolver las dos cuestiones "cuanto antes", pero que no podían precisar el día.