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Pura sombra sosegada

Además de por su poesía Vicente Aleixandre será recordado por su hospitalidad Siempre enemigo de recono cimientos oficiales, en 1977, cuando las autoridades municipales anunciaron el cambio de nombre de la calle de Velintonía -en realidad, se llamaba Wellingtonia pero él lo había castellanizado- por el de calle de Vicente Aleixandre, el poeta declaró que se sentía muy honrado pero que prefería que con su nombre fuera rotulada otra calle cualquiera. "El lugar no me importa", añadió.Aun así, la calle fue rebautizada Vicente Aleixandre y Camilo José Cela, Pedro Laín, Antonio Buero, Alonso Zamora, -Luis Rosales y el entonces alcalde José Luis Álvarez, entre otros, asistieron al acto de inauguración. El poeta, que sólo tenía que cruzar la calle, no asisitió y se limitó a saludar a los asistentes desde la ventana.

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En la soleada mañana de ayer quedaban en Velintonia tres árboles deshojados, un mirador metálico cerrado, un jardín descuidado, una placa de la asociación de escritores "al socio de honor", un buzón que empieza a oxidarse y algunas cajas de embalaje. Una vecina barre el balcón. Se apoya en la escoba: "Ya no queda nadie".

El vacío de la casa hacía recordar el soneto de Aleixandre Sombra final, que termina: "Oh, noche oscura. Ya no espero nada. / La soledad no miente a mi sentido. / Reina la pura sombra sosegada".

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