150º aniversario de la muerte de Pushkin
Un duelo forzado por las habladurías de unos -cortesanos malévolos fue la causa de que el 29 de enero de 1837 muriese en San Petersburgo Aleksandr Pushkin, el más importante poeta ruso, cuya capacidad creadora abarcó todos los géneros. Fue autor de poesías líricas y poemas largos -como Los gitanos, que sugirió a Merirnée su Carmen-, varias obras teatrales breves -Mozart y Salieri, El caballero avaro, El convidado de piedra, en la que sitúa al eterno personaje Don Juan en Madrid, y, en especial, su drama Boris Godunov, que protagoniza este, zar de un período muy agitado de la historia rusa-, los bellos Cuentos de Belkin, que con su novela La hija del capitán son sus obras más traducidas en España, y una novela en verso, Eugenio Onieguin, que Chaikovski convirtió en ópera y que se ha considerado una crónica, llena de humor e inteligencia, de la vida rusa en las primeras décadas del siglo pasado.A los 150 años de su muerte su influencia literaria perdura, y todo ruso conoce de memoria muchos de sus poemas líricos. Cada año se celebra un festival cerca del monasterio Sviatogorski, donde está enterrado, próximo a la ciudad de Pskov, y en un gran claro del bosque se reúnen miles de personas que llegan de los pueblos de la comarca para escuchar a los numerosos poetas, soviéticos y extranjeros, que durante todo el día recitan poesías tanto propias como de Pushkin. También en Madrid Aleksandr Pushkin tiene una estatua, en el parque de la Fuente del Berro, inaugurada en 1981 por Enrique Tierno Galván.
Juan Eduardo Zúñiga es escritor, especializado en literaturas eslavas, y autor de una biografía de Ivan Turgueniev y de El anillo de Pushkin.
