Ayer escuché

que en un pueblo de Murcia unos niños no iban al colegio porque a dicho colegio iban otros niños que eran gitanos. Da pena oír, ver y leer cosas como ésta. Es vergonzoso reivindicar ciertos derechos, cuando pisamos de una manera tan grosera, maleducada, hosca y bárbara los derechos de unas personas que, diferentes o no, tienen el mismo derecho que cualquier otra a disfrutar lo poco que esita sociedad tiene que ofrecer. Quien lo niegue es un racista.Cuando un gitano lleva a sus hijos a un colegio, bien sabe que no les van a enseñar a robar gallinas ni a tasar chatarra; cuando un gitano lleva a sus hijos al colegio es porque quiere lo mismo, exactamente lo mismo, que lo que queremos los demás padres, incluidos algunos padres de Sangonera.- Matías Fernández.