La dimisión del portavoz de Shultz evidencia la campaña de desinformación
Medios periodísticos en Washington consideran que la dimisión de Bernard Kalb como portavoz del Departamento de Estado norteamericano es una prueba más de la existencia de una campaña de desinformación por parte de la Administración de Reagan.El paso dado por Kalb resulta embarazoso para la Casa Blanca en vísperas de la reunión en Islandia del presidente Ronald Reagan y el líder soviético, Mijail Gorbachov.
"Un acontecimiento [como la cumbre en Reikiavik] no debe llevar al silencio. Los acontecimientos en un calendario no pueden inhibir a uno en cosas que son sumamente importantes", dijo Kalb al explicar su decisión.
La dimisión de Kalb, que ocupaba el cargo de secretario de Estado adjunto para Asuntos Públicos, llegó tras las revelaciones por The Washington Post de una "campaña de desinformación" por parte de la Administración "para confundir y despistar al líder libio, Muammar el Gaddafi".
La campaña implicaba filtrar, información falsa a la Prensa. The Wall Street Journal publicó, parte de esta información el 25 de agosto pasado. El secretario de Estado, George Shultz negó que existiera tal campaña.
Bernard Kalb, al referirse a su renuncia, se negó a confirmar la existencia de una política de diseminación de información falsa para lograr objetivos políticos. Leonard Downie, director ejecutivo de The Washington Post, comentó que la dimisión de Kalb confirma, sin embargo, lo que publicó ese diario.
Kalb se forjó una reputación de integridad informativa como corresponsal de la cadena de televisión NBC para cubrir el Departamento de Estado. Para muchos periodistas, la dimisión de Kalb es coherente con esta reputación.
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