El fiscal antidroga pide 11 años de cárcel para un diplomático colombiano
El fiscal antidroga, Enrique Abad, ha solicitado una pena de 11 años de prisión por delito contra la salud pública (tráfico de drogas) y contrabando para el diplomático colombiano Gustavo Jácome Lemus, uno de los (los procesados en el caso conocido como la narcovalija, ya que desde la oficina de prensa de la presidencia de Colombia se realizaban, a través de la valija diplomática, envíos de cocaína que iban camuflados en estuches de películas para la televisión. Jácome solicitó ayer a la Audiencia Provincial de Madrid que se inhiba en el proceso que sigue contra él y pueda ser juzgado en Colombia.
El fiscal pide también 11 años de cárcel para el otro procesado en la causa, el periodista de Valladolid José Javier Gómez Ballesteros, que permanece en prisión preventiva.Ayer, en el curso de la vista de un artículo de previo pronunciamiento (cuestión que debe resolverse antes del juicio), José María Martínez Fresneda, abogado de Gustavo Jácome, solicitó que la Audiencia de Madrid declinara el enjuiciamiento del ex secretario de la Embajada colombiana en Madrid en favor de las autoridades colombianas. El abogado señaló que Jácome tenía inmunidad diplomática en el momento de ser detenido, y que éste era un derecho individual suyo que no podía ser revocado, aunque el presidente de la República colombiana, Belisario Betancur, declarara "la insubsistencia" en el cargo de Jácome nada más tener conocimiento de los hechos.
El abogado de Jácome afirmó que éste ya ha sido absuelto por el procurador general de Colombia (equivalente al fiscal del Estado en España).
Marcos García Montes, abogado de Gómez Ballesteros, se adhirió a la petición de Jácome y pidió la libertad de su defendido García Montes se preguntó por qué un periodista de Valladolid no era tratado igual que un diplomático colombiano, puesto que el primero permanece en prisión, después de 22 meses mientras que el segundo se encuentra en libertad bajo fianza de un millón de pesetas.
El fiscal antidroga, Enrique Abad, puso de manifiesto que Jácome debe ser juzgado en España de acuerdo con el Convenio de Viena, ya que los Estados acreditantes pueden renunciar a la inmunidad de sus agentes diplomáticos, como es el caso del segundo secretario de la Embajada colombiana. Respecto a la petición de libertad de Ballesteros, el fiscal dijo que no procedía, porque esa supuesta igualdad es ficticia, pues el juez tiene la potestad de ordenar la prisión en la creencia de que el justiciable vaya a eludir la acción de la justicia.
Jácome fue implicado en el tráfico de droga por medio de la valija diplomática colombiana, a raíz de la detención de Gómez Ballesteros, al que la policía intervino más de 2,6 kilos de cocaína, si bien puntualizó en una carta enviada a EL PAÍS que él era únicamente el encargado de trasladar la valija diplomática, convenientemente sellada, desde el aeropuerto a la sede diplomática, pero que su apertura dependía de la secretaría del embajador, y la distribución de su contenido correspondía al ministro consejero de la embajada.
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