El coste de las obras de acondicionamiento del Museo del Prado se ha multiplicado por 10

El coste total de las obras de acondicionamiento del Museo del Prado, que duran ya 10 años, se ha multiplicado, al menos, por 10. Presupuestadas en 1,976 con 345 millones de pesetas, las obras, que iban a concluir a finales de 1978, no han terminado todavía, y su coste asciende ya a "varios miles de millones de pesetas", según apuntan en el mismo museo. Hoy las obras marchan a ritmo lento y queda un tercio por hacer. Hasta el momento ha sido imposible conocer la cantidad exacta que las obras, han costado al erario público. Sólo para el próximo año el museo pagará 500 millones para continuarlas.

"Es difícil evaluar el historial de las obras de acondicionamiento del Prado", dice el gerente del museo, Jorge Palacios, "ya que se sobreponen proyectos y costes diversos en 10 años. Ahora las obras no están paralizadas, pero sí van más lentas de lo habitual porque se está preparando un proyecto nuevo". Ni Jorge Palacios ni el jefe de mantenimiento y obras del museo. Pablo Fernández Alba, quisieron hacer público el coste exacto de las obras por considerar que debían respetar la línea jerárquica. El director del Museo del Prado, Alfonso Pérez Sánchez, estaba ayer de viaje, y la subdirectora, Manuela Mena, está de vacaciones.En el Ministerio de Cultura, departamento del que dependía hasta el pasado año el Museo del Prado, tampoco pudieron facilitar ayer los datos, aunque en la Dirección General de Bellas Artes aseguraron que hay un informe completo sobre el asunto. En el gabinete de prensa prometieron por segunda vez (ya antes de agosto este periódico recibió la misma respuesta) facilitar los datos la próxima semana. "Un viernes por la tarde no viene nadie al ministerio; es imposible hacer ninguna gestión", dijo una persona del gabinete.

La idea de climatizar las salas del Museo del Prado -para que las obras no estuvieran expuestas al medio ambiente contaminado del paseo del Prado madrileño y para que todas sus salas contaran con aire acondicionado a 20º centígrados constantes, fue del entonces Ministerio de Educación y Ciencia. Era el año 1976, siendo director del Prado Xavier de Salas, cuando comenzaron las obras. Su terminación se preveía para finales de 1978. Las obras continuaban en 1979, año en que se aprobó el decreto por el que se adjudicaban para el Museo del Prado otros 1.200 millones de pesetas destinados a dichas obras.

A partir de entonces se pierde la cuenta del dinero gastado en unos trabajos que no parecen tener fin, aunque han sido varios los directores del Prado que se han atribuido la culminación definitiva de los mismos. Incluso un consejo de ministros celebrado en 1980 adoptó la resolución de acelerar las obras. "El conjunto de las obras de acondicionamiento del museo", decía la nota facilitada por el Gobierno, "estará terminado en el año 1983. Éstos son los compromisos que el ministro, don Ricardo de la Cierva, asumió públicamente ante los Reyes de España en el reciente Día de las Bellas Artes, en el propio Museo del Prado".

Herencia

Javier Tusell, director general de Bellas Artes entre 1979 y 1982, cree recordar que en el Museo del Prado se gastaban anualmente unos 1.500 millones de pesetas en las obras. "No recuerdo exactamente", dice Tusell, "lo que sí es seguro es que las obras del Prado costaban en total más de lo que costaban todas las obras de todos los museos de España juntos". Tusell cree que no hay que extrañarse por el hecho de que las obras duren tanto tiempo. "Quince años duraron los trabajos de climatización de la National Gallery", dice.Alfonso Pérez Sánchez, director del museo desde primeros de 1983, heredó las obras pendientes. Recientemente, en una conferencía de prensa, anunció la finalización de las obras para el próximo año.

En 1984, la partida de inversiones reales, en las que figura el gasto dedicado a las obras, era con 482 millones de pesetas, la más elevada. Tal partida ascendió en 1985 a 530 millones de pesetas, y en 1986, a 1.040 millones. Este año la cifra se ha duplicado, debido a que la adquisición del palacio de Villahermosa cuesta anualmente unos 500 millones al Museo del Prado. Para 1987, en el presupuesto elaborado en el museo, se prevé que las obras costarán 500 millones de pesetas (otro tanto se destina al pago de la anualidad del palacio de Villahermosa).

Las obras de acondicionamiento del Prado suponen un importantísimo pellizco para la economía de la pinacoteca. En el anteproyecto de presupuesto, los responsables del museo han calculado unos gastos para 1987 de 2.858 millones de pesetas. Una sexta parte de estos gastos -500 millones- se dedicará a pagar esas obras de acondicionamiento de nunca acabar.