El fiscal pide 39 años para un 'ertzaina' acusado de ser miembro de ETA

El fiscal de la Audiencia Nacional ha solicitado penas que totalizan 39 años de prisión para el ex miembro de la Ertzantza (policía autónoma vasca) José María Lizarraga Goikoetxea, integrante del comando de acción de ETA Zorrotza-Atxio, que tenía su base en Ataun (Guipúzcoa). El fiscal asegura que Lizarraga formó grupo en ETA con otro miembro de la Ertzantza, que murió en un accidente de carretera, y con el que llegó a intentar atracar una gasolinera para recaudar fondos para la organización.

El fiscal pide también penas que suman 69 años para Juan Carlos Yoldi Múgica, 31 años para José Goikoetxea Munduate, siete años para José Suquía Arruabarrena y dos años para María. del Carmen Ayerbe Múgica y Para Gregorio Imaz Aguirre.

Según el relato de hechos del fiscal, Lizarraga, Goikoetxea y Yoldi eran miembros del comando Zorrotza-Atxio, de E7TA. Militar. Según el fiscal Lizarraga, inicialmente, formaba grupo con otro miembro de la Ertzantza apellidado Bastarrica y que falleció en un accidente de tráfico cuando circulaba en una motocicleta. Los dos miembros de la Ertzantza prestaban sus servicios en la comisaría de Beasain (Guipúzcoa).

Al comando le fueron incautadas dos metralletas, cinco pistolas y siete bombas de mano. Algunas de esas armas habían sido utilizadas en otros atentados perpetra dos con anterioridad a la fecha de formación del comando, hechos que se imputan a diversos militantes de la organización considerados como históricos.

Atracos y bombas

En marzo de 1984, Lizarraga y Bastarrica trataron de robar la recaudación de una gasolinera en Legorreta. En febrero de 1985, Goikoetxea y Yoldi colocaron una bomba en el bar Pariamá de Beasain, que produjo graves lesiones a un miembro de la Ertzantza y heridas leves a otros dos, así como importantes daños materiales. En marzo de ese año, Yoldi colocó un artefacto en un taller de Lazcano, que causó daños materiales. En mayo, Lizarraga y Yoldi ametrallaron un camión que trasladaba coches de la marca Renault, y el mismo día colocaron dos artefactos en un vagón de Renfe situado en la estación de Beasain en el que había embarcados varios vehículos de marca Renault.Las huellas encontradas en el temporizador de uno de los explosivos de la estación de Beasain corresponden a Juan Carlos Yoldi, según prueba pericial del Gabinete de Investigación de la Guardia Civil.

Suquía, que no pertenece al comando, era miembro de ETA desde 1979 y estaba encargado, según el fiscal, de transportar, en un hueco practicado en la carga de su camión, a activistas de la organización. Carmen Ayerbe había construido, en unión de su hermano, que se encuentra en rebeldía, un refugio, para ocultar a personas huidas, en la vaquería del caserío donde residían. Imaz había cooperado con ETA en 1979 llevando herramientas desde Navarra a Hernani (Guipúzcoa).