Ni a La Habana ni a Moscú

El papa Juan Pablo II no viajará de momento ni a Cuba ni a la Unión Soviética, según manifestó él mismo a los periodistas en el avión que le trasladó a Colombia. Durante las 12 horas largas de viaje desde Roma hasta Bogotá hubo tiempo para todo y el Pontífice se entretuvo esta vez sin prisa con los periodistas, que le bombardearon a preguntas. Al final, estuvo contento: "Veo", dijo, "que los periodistas todavía aceptan al Papa y aún no le rechazan".Quedó claro en la conversación con el papa Wojtyla que, por ahora, no habrá viaje a Cuba. En este aspecto fue incluso tajante: "No se pueden crear", dijo, "niayores problemas a la Iglesia de aquel país". El sustituto de la Secretaría de Estado, el riojano Eduardo Martínez Somalo, que recordó ante los periodistas sus tiempos de nuncio en Colombia antes de ser destinado al Vaticano, aclaró que el Papa se había referido al hecho de que un viaje tan delicado a Cuba, si no se prepara bien y con calma, podría crear tensiones dentro de la propia Iglesia cubana.

Tampoco el viaje a Moscú, sobre el que tanto se había especulado últimamente, va a resultar fácil. El papa Wojtyla fue también claro al respecto. "Estamos esperando", dijo, "a que la Iglesia en aquel país pueda llevar una vida normal y vivir su fe en libertad".

A Paloma Gómez Borrero el Papa le preguntó por qué no trabajaba ya para Televisión Española y ella respondió que porque no la quieren. Preguntada por el motivo, la periodista respondió: "Porque hablaba siempre bien de Su Santidad".

El ambiente era distendido y hasta el médico personal del Papa, el italiano Renato Buzzonetti, se dejó llevar contando chistes sobre políticos italianos.