Hacienda tendrá grandes dificultades para utilizar las listas de intereses bancarios

Hacienda encontrará grandes dificultades para utilizar las listas de perceptores de intereses que acaban de entregarle los bancos y cajas de ahorro. Mientras que las declaraciones de los contribuyentes deben referirse a todo el año 1985, la banca sólo ha entregado datos del segundo semestre. Las retenciones del 18% sobre rentas del capital llegadas al fisco con cargo a la actual campaña ascendieron a 135.941 millones de pesetas, el 8,1% más que en 1984. Las del trabajo aumentaron el 6,7% y totalizaron 1.070.742 millones, pese a la reducción de tipos aplicada hace ahora un año.

Fuentes bancarias han asegurado que la relación de las rentas del capital entregadas la pasada semana al fisco se refiere sólo al segundo semestre de 1985. En las listas aparece el nombre y apellidos del titular de cada cuenta, su número del carné de identidad, la suma de retenciones efectuadas y el total de los intereses percibidos por cada cuenta desde junio último.Si bien alguna entidad podría haber entregado las relaciones correspondientes a todo el año, el criterio general de la banca ha sido no sentirse obligada a prestar dicha colaboración con Hacienda desde principos de junio último. Su argumento es que la ley de activos financieros que introdujo esta obligación no entró en vigor hasta el 29 de mayo.

Para Hacienda, que ha mantenido un pleito con la banca desde 1980, la confirmación de tal actitud plantearía grandes problemas. Las declaraciones que formularán los contribuyentes durante la presente campaña se referirán a las rentas del capi,tal percibidas durante todo el año 1985, sin especificar los períodos a que corresponden. Así, el fisco no podrá contrastar la cuantía exacta de los datos obtenidos por una y otra fuente. Si quiere determinarla, tendrá que pedir aclaraciones a cada contribuyente, trabajo que no ha afrontado en los últimos años.

Un portavoz de la inspección declaró ayer que desconocía la amplitud de los datos recibidos por Hacienda, pues los soportes magnéticos entregados por bancos y cajas de ahorro hasta el 30 de abril aún no han sido analizados en el Centro de Proceso de Datos, donde hay preparado un equipo para analizar la información. Pero agregó que la omisión de los datos del primer semestre sería sancionable.

Sanciones por omisión

Con la reforma legal del pasado año, la omisión de cada dato puede ser sancionada con multas que van desde 1.000 a 200.000 pesetas, por lo que en el caso de un gran banco podrían sumar varios cientos de millones de pesetas.El presidente de la Asociación Española de la Banca, Rafael Termes, ha declarado que la banca no tiene ninguna obligación en este sentido hasta junio de 1985. Tras confirmar que hay planteado un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional para no entregar dichas listas desde 1980 -perdido en todas las instancias-, Termes afirmó que, en caso de que ahora no prospere, los bancos comunicarán a los clientes su sentimiento por no haber podido defender el sflencio para los últimos cinco años.