El libro de ocasión desplaza al antiguo en la feria madrileña

La X Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, inaugurada ayer en Madrid por el alcalde, Juan Barranco, ofrece más libros de ocasión que antiguos. Es frecuente el cartel de 100 pesetas y puede adquirirse casi de todo por este precio. En general, restos de ediciones y buen número de volúmenes de quiosco. Treinta y cinco libreros de Madrid, Barcelona, Sevilla, Granada y Valencia exponen, hasta el 21 de mayo, más de 250.000 ejemplares de libros antiguos, raros o baratos. El periodista Luis Carandell leyó el tradicional pregón.

Dos evidencias planean sobre esta edición de la Feria, instalada, como es habitual, en el madrileño paseo de Recoletos. La primera, confirmada por varios expositores, es que en España es ya casi imposible encontrar una verdadera joya bibliográfica entre un montón de libros polvorientos. La gente que vende la biblioteca del abuelo se asesora y, en ¡general, sabe muy bien lo que vende. Es difícil, por tanto, encontrar oportunidades. Los profesionales deben abrir su campo de acción y cada vez es más frecuente el viaje a Latinoamérica, que puede llegar a rentabilizarse con un par de maletas llenas, a la vuelta, de primeras ediciones.La segunda evidencia es que el libro verdaderamente raro y exclusivo, el que acarician con cuidado los coleccionistas, no se expone en la feria y tampoco en los estantes de los libreros de viejo. Hay que llegar Cuando el establecimiento está cerrando y consultar la lista, el índice que da prestigio, y presencia ante los coleccionistas, un mercado que ha crecido los últimos años.

Ésta es, sin embargo, la feria del libro de quiosco. Toda clase de títulos, clásicos y colecciones, a 20 duros. Si el tiempo acompaña -y lo hacía la mañana de ayer- numeroso público recorre el paseo y termina llevándose algún volumen. Los libreros esperan vender este año unos 60.000 ejemplares.

Vicente es el responsable de una librería que acude por primera vez a la feria. Muestra una primera edición de Lorca en la colección La Farsa, editada del año 1927 al 1936. Su precio, en torno a las 6.000 pesetas. Tiene también varios números de Les Temps modernes, la revista que dirigiera Jean Paul Sartre (unas 500 pesetas cada volumen) y una colección bastante completa de La novela mundial.

"Cada vez es más difícil encontrar, cuesta mucho", afirma, "pero ahora se vende mucho más porque el gran público accede al libro antiguo".

La familia Blázquez es una de las que tiene más tradición en Madrid. Tres hermanos vienen exponiendo desde el comienzo de la feria. Carmelo, uno de los hermanos, no muestra mucho interés en enseñar sus novedades y remite al catálogo que han editado los libreros. Su padre se dedicó al libro antiguo durante más de 40 años y, reconoce Carmelo, "el negocio desde entonces ha cambiado mucho".

La feria del libro se completa, también como es habitual, con venta de grabados e ilustración en muchas casetas y con la oferta de varios vendedores por libre que recorren incansables el paseo: Del autor al lector.