Los países europeos de la OTAN piden que Moscú limite sus misiles de corto alcance

ENVIADO ESPECIALLos aliados europeos de Estados Unidos en la OTAN insistieron en la reunión del Grupo de Planes Nucleares (GPN) que concluyó ayer en Wurzburgo (República Federal de Alemania) en que toda eliminación negociada con la URSS de los misiles de alcance medio (los llamados euromisiles) debe ir acompañada de limitaciones de los misiles soviéticos de más corto alcance.

La idea de una defensa antimisiles europea parece haber muerto en Würzburg, al insistir la RFA en que este debate se desarrolle en el marco de la OTAN, y no en uno europeo como el Grupo Europeo Independiente de Programas (GEIP) o la Unión Europea Occidental (UEO). Las propuestas norteamericanas en Ginebra hablan de limitaciones, no concretadas en cifras, según fuentes atlánticas, en los misiles de corto alcance, pero no aún al mismo nivel que los euromisiles. Según fuentes atlánticas, la RFA insistió en este tema en el que EE UU aún no quiere entrar de lleno, ni comprometerse de modo total. El comunicado final del NPG recoge la idea de tal limitación -"disposiciones adecuadas que prescriban derechos y restricciones"- de los sistemas de alcance más corto.

El ministro de Defensa alemán, Manfred Warner, señaló que su intención no era lanzar una iniciativa de defensa europea, sino ampliar la defensa aérea de la OTAN contra los aviones y los misiles balísticos y no balísticos de corto y medio alcance. Ésta sería una defensa no nuclear -con medios terrestres y aéreos-, por lo que Wörner no quiso plantearla directamente en el NPG, aunque podrá surgir en la reunión de abril del Comité de Planes de Defensa.

La defensa contra los misiles de corto alcance, cargados con cabezas nucleares o convencionales, puede ser el gran tema de discusión de la OTAN en los próximos años. Pero lord Carrington insistió, y pareció haber convencido de ello a Wörner, en que esta cuestión debe ser abordada en el marco de la OTAN.

Escudo para Europa

El secretario de Defensa norteamericano, Caspar Weinberger, aseguró que, si la Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI) funciona, será capaz de parar tanto los misiles balísticos intercontinentales como los de alcance medio que amenazan a Europa occidental.

Weinberger dejó sentado que la SDI es una "prioridad absoluta" y no contituye, pues, un "comodín para negociar". "Cada vez soy más optimista", añadió mostrando en su mano, como ejemplo de m iniaturiz ación, un giroláser de navegación aérea (útil también para destruir misiles en vuelo) en su versión actual -del tamaño de la palma de una mano- y su versión futura, que es como un garbanzo. Weinberger consideró que las derivaciones tecnológicas de la SDI serán sin duda útiles para mejorar la defensa aérea integrada de la OTAN.

Por otro lado, los aliados mostraron su preocupación por los "indicios", presentados por EE UU, sobre violaciones de los tratados de control de armamentos por parte de la URS S, y señalaron que "no puede haber dos pesos y dos medidas para la aplicación" de estos acuerdos.

Los aliados prosiguieron sus consultas sobre la decisión de 1983 de retirar 1.400 cabezas nucleares (además de otras 1.000 decididas anteriormente) de la parte europea de la OTAN, con lo que el arsenal nuclear de la OTAN en Europa "será el mas bajo desde hace 20 años".

Weinberger ha rechazado nuevamente un Tratado de Prohibición Total de las Pruebas Nucleares. Sigue prevaleciendo el principio de que las potencias nucleares consultarán el uso de armas atómicas con los aliados "si el tiempo y las circunstancias lo permiten".