Recuperación de Víctor García, recuerdo de Brecht

La obra Yerma, de Federico García Lorca, se repone mañana en el teatro de la Comedia. Es un montaje estrenado en el mismo escenario en 1971 por la compañía de Núria Espert, y que a lo largo de seis años supuso uno de los más importantes pasaportes teatrales españoles fuera de nuestras fronteras. Se ha intentado recuperar a la mayoría de los profesionales que intervinieron entonces. Núria Espert ha sido la persona que ha querido que así ocurriera. La reposición coincide con el 50º aniversario de la muerte de Lorca. Núria Espert interviene no sólo como actriz, sino como ayudante de dirección de Víctor García, cuya puesta en escena ha sido respetada en su totalidad.Por otra parte, el Centro Dramático Nacional estrena esta noche Madre Coraje, de Bertolt Brecht, cuyo montaje llevó a cabo el propio autor, con su compañía del Berliner Ensemble, hace 25 años. Al frente del reparto del montaje de Lluís Pasqual está la actriz catalana Rosa Maria Sardá, poco conocida en los escenarios madrileños, donde no actuaba desde 1978, en que interpretó Esperando a Godot, de Beckett, y que está ligada desde hace años al teatro catalán (véase EL PAÍS del 31 de enero).

Para Lluís Pasqual, la actualidad de Madre Coraje está conectada con el momento de amenaza que vive hoy el mundo. "Madre Coraje es ese ser contradictorio que produce un mundo hostil para el ser humano, ese poder que se dedica a jugar con el miedo de los demás, miedo que provoca la amenaza de una guerra o conflicto bélico".