Recuperar un edificio del centro histórico

La Fundación Santillana ha recuperado y reconvertido uno de los edificios más interesantes del casco histórico artístico madrileño para habilitar su nueva sede en Madrid. El trabajo de reconversión del edificio ha sido dirigido por el arquitecto Gabriel Allende. Con él han colaborado los arquitectos Ignacio Sainz de Vicuña y Manuel Bernar.Allende, madrileño de 33 años, con 10 años dedicados a la arquitectura, ha respetado las características de este palacete construido en la década de los años treinta, así como su uso actual. Anteriormente fue sede del primitivo Instituto Británico, edificio de oficinas, y más tarde sede de las embajadas de Túnez y de Filipinas. El entorno museístico que rodea al palacete ha sido tenido en cuenta por los arquitectos, ya que está localizado junto al Museo del Prado, el Jardín Botánico, Museo del Ejército, Casón del Buen Retiro, Centro Cultural de la Villa de Madrid, Biblioteca Nacional, el futuro centro cultural Reina Sofía y la mayor parte de galerías de exposiciones de Madrid.

Gabriel Allende resume su trabajo diciendo que ha tratado de combinar la singularidad de un edificio catalogado con las necesidades que requiere su uso actual. El diseño y el mobiliario han sido las vías de escape por las que Allende ha podido introducir lo que él llama "locuras arquitectónicas" y que consisten en encontrarse un faro esculpido en una escalera o sorprender con numerosos detalles innovadores.

El interior del edificio gira en torno a un patio central coronado con una gran cúpula acristalada que permite una gran luminosidad al interior. La planta baja ha sido dedicada a sala de exposiciones, mientras que la primera y la segunda están destinadas a oficinas de la fundación.

La sede madrileña de la Fundación Santillana está situada en la calle Méndez Núñez, 17. La exposición inaugurada ayer con obras de Juan Gris, Luis Fernández, Antoni Tápies y Eduardo Chillida permanecerá abierta hasta media dos del próximo mes de febrero. Las salas de exposiciones podrán ser visitadas diariamente desde las seis de la tarde hasta las nueve de la noche, excepto los sábados, día en que se - abrirá desde las diez de la mañana hasta las dos de la tarde. Las salas estarán cerradas los domingos y festivos.