Washington sigue la `pista libia'

Estados Unidos investiga la posible existencia de una conexión libia en el secuestro del avión de Egypt Air, según manifestaron ayer fuentes norteamericanas. "La conexión libia aparece como una lógica consecuencia", dijo un portavoz. "Todavía no iría demasiado a fondo en esto porque no creo que sepamos aún lo suficiente", agregó cautamente. El Cairo considera también que los mentores del acto de pirateria pueden ser libios.

A la primera reivindicación del secuestro del avión formulada, según las autoridades de E1 Cairo, por Revolución Egipcia, se añadió ayer la de un grupo hasta ahora desconocido, la Organización de Liberación Egipcia (OLE).

El ministro de Exteriores egipcio, Esmat Abdel Meguid, afirmó anteayer en Paris que no creía que esta organización existiese verdaderamente, y la versión oficial del Gobierno cairota de lo sucedido en Malta acusa a un grupo escindido de la Organización para la Liberación de Palestina, aunque da también a entender que los piratas aéreos trabajan para un país árabe que sólo puede ser Libia.

[Libia condenó ayer "sin reservas la intervención intempestiva y mal planificada de las fuerzas egipcias", al tiempo que lamentó "vivamente la matanza de los civiles". "El régimen egipcio ha tomado la iniciativa de asesinar a decenos de inocentes por su comportamiento irreflexivo", afirmó la agencia oficial libia Jana. "La responsabilidad de las autoridades egipcias en la carnicería es total", agrega el comunicado.)

En un comunicado publicado ayer por los diarios Al Qabas y Al Watan, de Kuwait, redactado antes del trágico desenlace de la operación-rescate llevada a cabo en el aeropuerto de Malta, la OLE pide al "Gobierno egipcio que abroge el acuerdo de la traición [Camp David] firmado por Sadat [presidente de Egipto, asesinado hace cuatro años] y que pone ahora en práctica Hosni Mubarak".

A diferencia de este último grupo, Revolución Egipcia tiene una trayectoria terrorista conocida que se inicia en 1984 con un atentado fallido contra la vida de un diplomático israelí en El Cairo y pasa por la realización de una operación suicida en coordinación con el partido Baaz prosirio en el sur de Libano y por el asesinato en agosto, en la capital cairota, de otro funcionario israelí.