El Tribunal de Cuentas comprueba graves irregularidades administrativas y de gestión en el Prado y en el MEAC
El Tribunal de Cuentas ha observado irregularidades contables y de gestión en los museos del Prado y en el MEAC entre 1978 y 1982, según las conclusiones de una auditoría remitida a las Cortes a la que tuvo acceso Efe. En el Prado se sustrajeron 762 millones al régimen de contabilidad pública, y en el MEAC se hizo la misma operación con 7.800.000 pesetas.Dionisio Hernández Gil, director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura desde octubre del pasado año, restó ayer importancia a estas irregularidades y precisé que "no falta ni un duro en ninguno de estos museos. Es más, no dudo de la total honestidad de los anteriores responsables de estos museos y de los directores generales que me han precedido. La irregularidad ha sido administrativa, no contable. En lugar de ingresar en el Tesoro Público el dinero generado por la venta de entradas y publicaciones, ingresaban los fondos e n unas cajas B para poder disponer antes del dinero. Esta operación suponía que esas cantidades no generaban crédito para el Tesoro y contravenían la ley". Igual tranquilidad manifestaron al respecto dos de los ex ministros de UCI), Ricardo de la Cierva e Íñigo Cavero, que ocuparon la cartera de Cultura en períodos comprendidos por la investigación del Tribunal de Cuentas. De la Cierva fue ministro entre septiembre de 1980 y noviembre de 1981; Cavero lo fue entre esta última fecha y diciembre de 1981.
La fiscalización del Tribunal de Cuentas afecta también al Patronato Nacional de Museos (organismo integrado por 15 funcionarios del Ministerio de Cultura), que en esos años se limitó a ser un mero gestor del presupuesto", dice el informe, "ajeno a los muchos y variados problemas de los museos y, por ello, ineficaz".
Ingresos no declarados
El Tribunal de Cuentas resalta en las conclusiones de su. fiscalización que en el Prado se sustrajeron en esos años al régimen de contabilidad pública, y por consiguiente a la rendición de cuentas, operaciones económicas que superan los 762 millones de pesetas, "mediante la ilícita práctica de atender pagos mediante ingresos no declarados en cuentas".
De esa cantidad, 130 millones de pesetas se destinaron a pagos de personal y no fueron sometidos a las retenciones por el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), y 107 millones. no se incluyeron en la cotización a la Seguridad Social.Estas actuaciones serán remitidas a la fiscalía del tribunal y, en su caso, a la abogacía del Estado "por existir en ellas indicios de responsabilidad contable, sin perjuicios de las actuaciones que ambos órganos pudieran ejercitar sobre estos hechos".
En el informe realizado por el tribunal se destaca que las circunstancias históricas, "a veces turbulentas", de su larga vida y las "indudables deficiencias de gestión en algunos períodos" han originado "una situación registral de perfiles inciertos y confusos".
Esta situación "no permite conocer a ciencia cierta las obras de arte que el museo debería tener, las que realmente tiene y dónde las tiene" y constituye "un factor objetivo de riesgo para la seguridad de su patrimonio artístico".
Entre las deficiencias observadas en este museo destacan la atomización, dispersión y uso privativo por ciertos funcionarios de documentos y registros, la falta de rigurosidad en la constitución, gestión y levantamiento de depósitos de obras en entidades públicas y la ausencia de un inventario o registro general actualizado.
lncumplimientos de normas
Han sido frecuentes los incumplimientos de normas sobre contratación de obras, suministros y, especialmente, asistencia técnica para mantenimiento y conservación. Al referirse al MEAC, el tribunal indica que su actividad en los últimos años se ha caracterizado "por la carencia de un reglamento de régimen y funcionamiento interior". Advierte del peligro por la ausencia de un inventario general de obras debidamente formalizado, el abandono y descontrol de almacenes, con el consiguiente riesgo para su salvaguarda y seguridad.
En el MEAC se han sustraído al régimen de contabilidad pública, entre 1978 y 1982, 7.800.000 pesetas. "La escasez de recursos humanos en el área económica origina una organización muy precaria y una contabilidad deficiente, que impiden la existencia de un control interno adecuado".
