El PSOE propone que la reducción de las pensiones sea gradual

El PSOE presentará en el Senado una enmienda al proyecto de ley de reforma de las pensiones que introduce una gradualidad en la reducción de las prestaciones por jubilación e invalidez permanente. Esta enmienda, que no pudo ser introducida ayer en la discusión en la correspondiente comisión del Senado -el Grupo Popular se opuso en virtud de razones técnicas-, no parece suficiente para cubrir las peticiones de UGT, que ayer consideró rotas sus negociaciones con el Gobierno

.La sombra de estas negociaciones pesó decisivamente ayer en la sesión de la comisión de Sanidad y Seguridad Social de la Cámara Alta.

El Grupo Socialista tenía pensado introducir en el Senado cuatro enmiendas, la más significativa de las cuales prevé que en las pensiones de jubilación e invalidez permanente se aplique una gradualidad en tres años, no prevista en el texto aprobado en el Congreso.

Cocientes

Según esta enmienda socialista, la base reguladora de estas pensiones será calculada, el primer año, por el cociente que resulte de dividir por 70 las bases de cotización del interesado durante los 60 meses (cinco años) inmediatamente anteriores a la jubilación o la invalidez.

Durante el segundo año de vigencia de la ley, el cálculo se hará en base al cociente que resulte de dividir por 84 las bases de cotización del interesado durante sus últimos 72 meses (seis años) en activo.

Y, durante el tercer año, el cociente será el resultante de dividir por 98 las bases de cotización durante los últimos 84 meses (siete años) en activo del interesado.

Pese a no haberse podido introducir en comisión como nueva disposición transitoria -por alegar el Grupo Popular que ello no está permitido por el reglamento de la Cámara-, la enmienda será presentada el lunes en la sesión plenaria que el Senado dedicará al debate del proyecto de ley de Reforma de la Seguridad Social y contará con el apoyo de los Grupos Popular, Vasco y Minoría Catalana.

Ello no significa que en el debate de ayer en comisión hubiese consenso sobre un proyecto duramente criticado por todos los grupos, excepto el socialista -"proyecto bastardo" lo llamó el senador popular Miguel Arias-.

Por otro lado, la ruptura de conversaciones entre el Gobierno y UGT cayó ayer como un jarro de agua fría en medio del Grupo Socialista del Senado, pese a ello, se cree que los socialistas presentarán numerosas enmiendas -aún no conocidas- en el debate en Pleno de la semana próxima, en un intento de para acercar posiciones con UGT.

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