González habla de 'fracaso total' y anuncia que la ley de Pensiones saldrá adelante

ENVIADO ESPECIALEl presidente del Gobierno español, Felipe González, manifestó en la capital holandesa que en España, ayer, no llegó a haber una huelga general, concepto éste que, según dijo, "es muy serio y no se puede frivolizar". En el aeropuerto declaró tajantemente que la huelga había sido "un fracaso total".

Antes, el presidente había subrayado que la ley de Pensiones, origen de la huelga, seguirá adelante ya que no creía que el Parlamento diera marcha atrás en un asunto ya decidido soberanamente. Felipe González agregó que tiene la voluntad de llevar adelante las medidas previstas porque está " moral y políticamente convencido" y es ésta "la única política posible".

Según González, no había ningún motivo para convocar una huelga general y, de hecho, según él, no la hubo. Poniendo como ejemplo la situación que se había registrado en Sevilla -con la ciudad paralizada por el paro de transportes públicos-, el jefe del Gobierno español dijo que paros sectoriales habían llevado a que se registrase unas mayores repercusiones, como sucedió en la capital andaluza. Todo ello, afirmó, "siguiendo unas técnicas que ya conocemos bien".

"Tengo la impresión", manifestó también González, "que antes de convocar la huelga se había dicho ya que sería seguida por dos millones de personas, para luego poder afirmar que la convocatoria había sido un éxito y que se habían superado las previsiones".

"Es", afirmó, "un ejercicio de irresponsabilidad grave convocar una huelga general por motivos que no son ciertos y ocultando los motivos ciertos, pero no confesables: la oposición desde una óptica comunista al primer Gobierno socialista de España, cosa que no han hecho ni harán a un Gobierno que no sea socialista".

Por su parte, el Partido Comunista, que mantuvo su secretariado reunido desde las ocho de la mañana de ayer, hizo pública una nota en la que, califica la convocatoria de "éxito rotundo" y habla del "amplio malestar suscitado por el recorte de las pensiones y por la política económica y social conservadora del gobierno de Felipe González".

El portavoz de Minoría Catalana en el Congreso, Miguel Roca afirmó que lo ocurrido ayer "no puede minimizarse" y añadió que " el Gobierno socialista debiera ser más sensible a lo que la jornada representa como estado de ánimo de una importante capa de la sociedad".

Agustín Rodriguez Sahagún, del Centro Democrático y Social (CDS) que lidera Adolfo Suarez, declaró que "la huelga es la respuesta a la falta de diálogo y a una política económica y social que no conecta con el pueblo español".

El Partido Nacionalista Vasco (PNV) a través de la oficina de prensa dijo que la actitud del gobierno socialista al aprobar en el Congreso la Ley de Pensiones en vísperas de la huelga "incurre en defecto de parcialidad, puesto que se oculta el sentido definitivo que puede tomar en el futuro el plan de reformas de una institución como la Seguridad Social".