El Consejo de Europa recomienda una formación más flexible

Los ministros de Educación -entre ellos, José María Maravall- de los 21 países miembros del Consejo de Europa concluyeron ayer en Bruselas su sesión bianual, que se abrió el martes, insistiendo en la necesidad de que la formación y la enseñanza de los jóvenes de 16 a 19 años "se conciba de un modo flexible para permitir el paso de una etapa a otra, y especialmente el acceso a una enseñanza superior y terciaria diversificada". La resolución final hace hincapié en la importancia de que "el sistema no entrañe ningún callejón sin salida".

De estos debates y de la resolución destaca la necesidad de una formación a la vez general y técnica, y de estrechar los vínculos entre la enseñanza y el mundo socioeconómico con, por ejemplo, contratos escuelas-empresas. Una novedad es la recomendación de que tras la escolarización obligatoria los jóvenes que no continúen por esta vía y que dejan la escuela sin alcanzar un diploma tengan la posibilidad de un programa complementarío de seis meses de duración que conjugue la formación de base con una prirnera experiencia profesional.Se piden asimismo medidas para reducir el número de jóvenes que abandonan la escuela sin alcanzar la titulacion del nivel corres pond iente y sin posibilidad de obtenerlas después.

Los ministros -que incluían también a representantes de Finlandia, la Santa Sede y de otros países como observadores- recomendaron asimismo la enseñanza de una lengua extranjera. El francés Jean Pierre Chévenement describió así la situación: "¿Qué es un trilingüe? Alguien que habla tres lenguas. ¿Y un bilingüe? El que habla dos lenguas. ¿Y un monolingüe? Un norteamericano".

Se recomienda también la enseñanza especial de las lenguas locales para los hijos de inmigrantes que llegan al final de su escolarización con un conocimiento insuficiente en esta materia.

Pero el Consejo de Europa pide también que estos inmigrantes no pierdan sus vínculos con su cultura de origen. También se recomienda tomar las medidas oportunas para que las jóvenes mujeres se beneficien de la totalidad del sistema educativo.

En general se reconoció que en la actualidad el paso de la escuela a la vida profesional es más dificil. Y el contexto socioeconómico en el que se asegura la formación se caracteriza más que nunca por la incertidumbre y las mutaciones rápidas de cara a las nuevas tecnologías.

Si la resolución final pide una reforma de la enseñanza más acorde con el mercado de trabajo, también insiste en la valoración de la cultura general y una formación que despierte el espíritu crítico en los jóvenes. "Hay que velar porque los jóvenes se beneficien tanto de una formación general como de una formación técnica", dice la resolución. Otra resolución aprobada en es la reunión pide acrecentar y favorecer la educación musical.