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Fuertes ovaciones para 'Stico' y 'De hombre a hombre' en el Festival de Cine de Berlín

La película Stico, del realizador español Jaime de Armiñán, que ayer se presentó en la sección competitiva del Festival de Cine de Berlín, fue recibida con risas y aplausos durante su proyección, y con una fuerte ovación final. Armiñán, y los actores Carme Elías, Agustín González y Fernando Fernán-Gómez fueron aplaudidos con entusiasmo. Fernán-Gómez ha obtenido un éxito personal en la sección infantil, donde se ha proyectado De hombre a hombre, de Ramón Fernández.

La sorprendente historia de un catedrático de Derecho en paro que se ofrece como esclavo a un antiguo y mediocre alumno suyo tiene, sin duda, una originalidad de planteamiento que sensibilizó al público de inmediato. Aunque el filme se mantenga en términos planos, sin rebuscar en sus múltiples sugerencias, Stico es una comedia abierta, ante la que el espectador puede reflexionar por diversas vertientes. "No hay libertad ni para dejar de ser libres", es la frase más destacada de toda la película, que el esclavo Stico debe pronunciar ante la derrota que sufre en su intento de ser alimentado de por vida.A ella se refirió igualmente Armiñan en la conferencia de prensa como la que podría sintetizar el sentido último de su filme. Señalando la ambigüedad que puede despertar en cualquiera el deseo de tener un esclavo a su servicio, Armiñan citó las llamadas telefónicas que se reciben en la productora de Madrid a raíz del lanzamiento. Un colegio de abogados español ha esbozado una protesta respecto a un anuncio publicitario en el que un catedrático de Derecho se ofrece como esclavo del mejor postor aunque según contó Armiñan, dicho colegio no se puso en contacto con la productora cuando previamente otro anuncio en la Prensa presentaba al mismo catedrático de Derecho vendiendo su extraordinaria biblioteca.

Mejora la calidad

Aunque el festival de este año da ya sus últimas bocanadas en espera de los premios, que deben conocerse mañana, martes, ha remontado el vuelo el pasado fin de semana. A la polémica división de los espectadores sobre el filme de Godard Je vous salue, Marie, ha seguido la presentación de una curiosa película británica, 19-19, espléndidamente interpretada por Paul Scofield y Maria Schell. Dos personas maduras que fueron psicoanaliza das por el propio Freud y ahora se cuentan sus experiencias.Un filme de la RDA, La mujer y el extranjero, realizado con sensibilidad por Rainer Simon y muy bien interpretado por Katherin Waligura, ha colaborado levantar la media. Narra el reencuentro de una mujer con el marido que creía muerto, cuando ya compartía su vida con otro hombre, y está localizado durante la I Guerra Mundial.

Ese clima melancólico es parecido al del filme argentino Contar hasta diez, de Óscar Barney Finn, si bien éste no tiene la misma medida dramática. El ambiente de miedo, de un dolor profundo que anida en el espíritu de muchos argentinos, es reflejado en Contar hasta diez a través de las investigaciones de un hombre en busca de su hermano, un desaparecido superviviente. La morosidad de las situaciones y cierto tono sensiblero arruinan en buena parte las excelencias del filme argentino.

Fuera de concurso, y en la sección infantil, se ha estrenado el filme español De hombre a hombre, dirigido por Ramón Fernández, protagonizado por Fernando Fernán-Gómez. Es un filme blanco que entusiasmó a la joven audiencia. Las peripecias de un niño de seis años y de un anciano, fugados de sus casas, despertaron numerosas risas y una seductora identificación por la libertad de los personajes. Fernán-Gómez fue muy aplaudido al subir al escenario, para ser más tarde rodeado por la chiquillería en busca de autógrafos. La película está realizada con la eficacia de Ramón Fernández y tiene una graciosa agilidad, que le permite pasar por los numerosos tópicos sin perder la simpatía.

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