El Gobierno estudia hoy el acuerdo alcanzado con Argelia sobre el gas natural
El Consejo de Ministros tiene previsto analizar hoy el principio de acuerdo alcanzado con Argelia sobre el contencioso del gas natural, según informaron fuentes solventes. El acuerdo será presentado por los ministerios que lo han negociado en sus aspectos técnicos, aunque su aprobación política depende aún de un detalle formal que aún se negocia.Los aspectos centrales del acuerdo (veáse EL PAÍS del pasado día 13) están ya ultimados y suponen la aceptación por España del precio europeo del gas (una subida de un dólar por millón de BTU unidad termal británica), el pago aplazado de una compensación a Argelia del orden de los 20.000 millones de pesetas y el alargamiento en más de cinco años de los plazos en la retirada por España de las cantidades anuales contratadas (45.000 millones de termias).
El estudio del acuerdo con Argelia no figura en el orden del día del Consejo de Ministros, pero según fuentes del Palacio de la Moncloa "eso no quiere decir que no vaya a ser presentado". Por otro lado, fuentes ministeriales confirmaron la intención de un ministerio de proponer la aprobación del principio de acuerdo, que ha sido alcanzado a lo largo de las conversaciones que, en las últimas semanas, se han celebrado por vía diplomática habitual y mediante negociaciones de emisarios personales de ambos Gobiernos.
Según fuentes solventes, el acuerdo está redactado prácticamente en su totalidad y "tan sólo falta un pequeño detalle, de aspecto formal, pero que puede tener serias repercusiones económicas". En este sentido, es posible que el Gobierno apruebe el acuerdo bajo la condición de que este "pequeño detalle" se resuelva.
Se firmará un protocolo
La firma del compromiso será bajo la fórnrula de un protocolo de cooperación que, previsiblemente, será ratificado a nivel ministerial y no a nivel de jefes de Gobierno, como en algún momento se pensó. El tema central del protocolo será el gas natural, aunque ambas partes manifiestan su voluntad de restablecer las relaciones políticas y económicas y de poner fin a las medidas de presión comercial a las que han recurrido.
Posteriormente, los presidentes de las empresas firmantes del acuerdo de 1975, Enagas y Sonatrach, ratificarán un avenant (documento de conformidad) sobre el contrato, que reformará jurídicamente las condiciones del mismo, pero bajo el mismo contrato legal. El acuerdo prevé también la retirada de la demanda argelina sobre Enagas presentada ante la Camara de Comercio Internacional de Ginebra. Fuentes españolas calificaron ayer de satisfactorio el acuerdo, dada la enorme complejidad jurídica y política de reformar el anterior acuerdo, que fue "malo" desde que se firmó. Asimismo, se lamentaron la ineficacia política y comercial en el desarrollo de esta fuente energética, que ha impedido cumplir el acuerdo de compra de gas.
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