Las calles de Bhopal permanecen desiertas mientras prosigue la reconversión del gas

Las calles de Bhopal seguían desiertas ayer, mientras científicos y técnicos convertían en pesticida los restos del depósito del gas metilisocianato perteneciente a una fábrica de la firma estadounidense Union Carbide, donde se produjo la fuga que causó la muerte de 2.500 personas.Una pequeña llama que oscilaba sobre una de las cúspides de la fábrica marcó la segunda jornada de los trabajos de neutralización de unas 15 toneladas del gas que se esparció cual nube venenosa sobre la ciudad el 3 de diciembre.

La radio india afirmó que ya habían sido convertidas cuatro toneladas, y que la operación concluirá probablemente el jueves. El subjefe de la policía local, Girish Tiwari, manifestó a Reuter que esperaba que las 250.000 personas -más de la cuarta parte de la población de Bliopal- que han huido de la ciudad presas del pánico comenzaran a regresar ayer por la noche.

Poco antes de que la planta fuera reabierta ayer por la mañana, un helicóptero roció el complejo industrial con agua, al tiempo que varios camiones regaban las calles, como medida preventiva frente a cualquier posible escape.

Hileras enteras de tiendas permanecieron cerradas y apenas se vio un puñado de paseantes, en el transcurso de un lunes que normalmente debería haber sido un día agitado. En la estación de autobuses, donde la semana pasada se apiñaban los residentes fugitivos, unos pocos policías vigilaban el recinto ahora desierto.

Más agentes patrullaban la ciudad para evitar el pillaje de las casas abandonadas. Arjun Singh, primer ministro del Estado de Madhya Padresh, cuya capital en Bhopal, estuvo dentro de la fábrica de Union Carbide durante las operaciones de ayer; dijo a los informadores que la situación es segura y que todos los ciudadanos pueden regresar a sus casas.