El PSOE y varios políticos e intelectuales critican a los organizadores de la marcha

El Pleno del Grupo Federal de Educación del PSOE hizo pública ayer una dura nota de crítica de la marcha contra la LODE, denunciando un "arcaico espíritu de cruzada" y "la sospecha sobre los motivos reales que animan a los organizadores". La nota también avisa sobre "la pretensión de patrimonializar el presupuesto del Estado y conservar intereses y privilegios que se oponen a la democratización efectiva del sistema educativo".Según este pleno, la fecha de la manifestación, "al ser anterior a la decisión que el Tribunal Constitucional debe adoptar sobre el recurso presentado por Alianza Popular contra la LODE, puede ser considerada como un intento de presionar sobre tan alta institución. Igualmente inoportuna nos parece la fecha por su proximidad a conmemoraciones contrarias al espíritu democrático".

En términos parecidos se expresó la corriente Izquierda Socialista del Partit dels Socialists Catalans (PSC), reunido ayer en Barcelona. Se denuncia a "sectores reaccionarios de la derecha" que "quieren defender los privilegios de una escuela privada y elitista subvencionada con el dinero público". Tanto el PSOE como el PSC expresan su apoyo a la LODE y a la política educativa del Gobierno.

La manifestación de hoy contra esta política educativa encubre "una concepción particularista y poco democrática del derecho a la enseñanza, apta para la defensa de privilegios de minorías", según un comunicado hecho público ayer y firmado por José María Diez Alegría, teólogo; José Luis Aranguren, filósofo, y Juan María Bandrés, diputado de Euskadiko Ezkerra, entre otros.

"Reconocemos que es un derecho democrático disentir y expresar colectivamente el desacuerdo ante las leyes, pero para alentar a esta manifestación se argumenta apelando a la conciencia cristiana y en defensa de la libertad de enseñanza", añade el comunicado.

"Desde nuestra propia conciencia cristiana y en defensa de la libertad de enseñanza de todos, expresamos nuestro desacuerdo con la idea de libertad de los convocantes".

El comunicado subraya que los organizadores de la manifestación "desconocen la solidaridad con los amplios sectores de la población que sufren las consecuencias de un sistema escolar deficiente y desigual". El comunicado tambien aparece firmado por Francisca Sauquillo, abogada; José Tamayo, director de teatro; Daniel Vidal, presidente de la Iglesia evangélica, y Jesús Montero, secretario general de la Unión de Juventudes Comunistas de España.

Montero precisó que el comunicado "era un punto de referencia frente a la manipulación del pensamiento cristiano, dejando claro que nadie puede utiliar un concepto universal como éste para intereses particulares y privados".