El Gobierno presentará fuera de plazo los presupuestos al Congreso
Los Presupuestos Generales del Estado para 1985, que, según la Constitución, deberían estar en el Congreso antes del próximo domingo, día 30 de septiembre, serán presentados por el Gobierno fuera de plazo. El Consejo de Ministros de hoy no aprobará la redacción definitiva del texto presupuestario, ya que a lo ya decidido por el Gabinete habrá que incorporar los detalles del Acuerdo Económico Social (AES) -que ayer quedó técnicamente perfilado-, a firmar con patronal y UGT, y la última negociación sobre las valoraciones a las comunidades catalana y gallega Así fines, ni hoy quedará definitivamente aprobado el presupuesto de 1985, ni entrará en el Congreso dentro del plazo previsto por la ley.
El gresidente del Gobierno, Felipe González, ya avanzó esta posíbilidad ayer en Valencia, en la inauguración de la 21ª edición de la Feria Internacional del Mueble. "Aunque se firmara hoy (por ayer) el acuerdo social, el ajuste presupuestario del acuerdo probablemente -repito, probablemente- no nos permitiría cumplir el plazo del 30 de septiembre para preparar los presupuestos, que son como una especie de diccionario de la lengua de esos que ocupan no sé cuantos volúmenes".Estas declaraciones fueron formuladas antes de las últimas reuniones mantenidas durante todo el día de ayer entre el ministro de Trabajo y los negociadores de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y de la Unión General de Trabajadores (UGT) para perfilar definitivamente, o romper, el AES para el resto de la legislatura. El AES tuvo ayer un avance sustantivo en casi todos los temas relacio nados con el presupuesto, quedan do pospuesta su firma definitiva a una decisión política de CEOE y UGT. El Comité Ejecutivo de CEOE valorará mañana el contenido global del acuerdo.
También mañana habrá un nueva ronda de conversaciones en la comisión mixta de valoraciones, entre los técnicos del Ministerio de Hacienda (principalmente José Borrell, secretario de Estado de Hacienda) y los representantes de las comunidades catalana y gallega. Así pues, la nueva fecha decisia el cierre de los presupuestos es mañana. A partir del viernes, el presidente del Gobierno puede convocar en cualquier momento una reunión monográfica del Gabinete para cerrar los presupuestos. Pasa a la página 51
El valor del acuerdo social es más psicológico que real, según el presidente
Felipe González anuncia que el Gobierno presentará los Presupuestos de 1985, muy probablemente, fuera de plazo
Viene de la primera página
Estas dificultades -el AES y las valoraciones- son los últimos escollos para el cierre de los presupuestos del año que viene. Antes, se han tenido que vencer las resistencias interministeriales para lograr el recorte presupuestario pedido por el ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, y conseguir dejar el déficit de 1985 en el 5% del Producto Interior Bruto. Asimismo, se ha tenido que encajar el nuevo sistema de retribuciones de los funcionarios, definido en la Ley de la Función Pública.
Una vez que el Gobierno dé el visto bueno definitivo al presupuesto, se necesitan 10 días para elaborarlo y redactarlo y que esté presentable para ir al Congreso de los Diputados. Según fuentes de Hacienda, si el proyecto fuese cerrado hoy en Consejo, hasta finales de la próxima semana no podría entrar en las Cortes. Sin embargo, en el departamento confían en que la infórmatización del proceso acelere su terminación técnica. El artículo 134 de la Constitución determina que "El Gobierno deberá presentar ante el Congreso de los Diputados los Presupuestos Generales del Estado al menos tres meses antes de la expiración de los del año anterior". El retraso en la aprobación y en la presentación ha motivado que Boyer no asistiese, en representación de España, a la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional. Según un portavoz de Hacienda, el ministro "está especialmente preocupado por las consecuencias que se pueden derivar del retraso en la firma del AES para los plazos de presentación del presupuesto en las Cortes".
Poco margen
En la conferencia de prensa dada por Felipe González en Valencia, el presidente comentó, según informa Manuel Muñoz, la relación entre el AES y los presupuestos: "Haremos esfuerzos para acabar inmediatamente, pero todavía tendremos un poco de margen aunque tengamos que retrasar probablemente en unos cuantos días la propia presentación de los presupuestos. La verdad es que el Gobierno ha hecho un enorme esfuerzo por que se firme el acuerdo socioeconómico. Sobre todo, porque a mi juicio, tiene una importancia de contenido y una importancia psicológica: da tranquilidad. Y la importancia psicológica de este año tal vez tenga incluso más valor que la importancia del contenido".
Significó González que afirmaba eso "porque los salarios van a caminar al nivel de los precios, y por tanto, la teoría del sacrificio salarial este año no es tan importante como otros en los que ha habido que hacer un ajuste. Y por otra parte, porque para los empresarios, parte de las reivindicaciones empresariales, digamos que ya son hechos adquiridos. La modificación del Estatuto de los Trabajadores, por una parte, y por otra parte, una cierta tendencia a la bija en el precio del dinero. Por tanto, las partes sociales no aportan tanto a este acuerdo social -no digo que no aporten nada- como podría resultar de beneficios psicológicos para el conjunto del país que hubiera un acuerdo. El Gobierno está haciendo el máximo esfuerzo para que lo haya. Porque nos parece bueno para todos. Empezando, ¿por qué no confesarlo?, por el Gobierno. Pero yo creo que es mucho más importante para el país que para el Gobierno, y tengo la esperanza todavía de que podamos conseguir algo.
Valoración positiva
Es significativo el hecho de que la presencia de Felipe González en Valencia haya sido valorada por los empresarios de la zona de forma absolutamente positiva. En un comunicado hecho público por la Confederación Empresarial Valenciana, vinculada a la cúpula patronal CEOE, se afirma que "los empresarios valencianos están entusiasmados por el camino de confianza, fortalecimiento y ánimo que el presidente González ha abierto para los empresarios", informa Efe.
Felipe González anuncia que el Gobierno presentará los Presupuestos de 1985, muy probablemente, fuera de plazo
Viene de la primera páginaEstas dificultades -el AES y las valoraciones- son los últimos escollos para el cierre de los presupuestos del año que viene. Antes, se han tenido que vencer las resistencias interministeriales para lograr el recorte presupuestario pedido por el ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, y conseguir dejar el déficit de 1985 en el 5% del Producto Interior Bruto. Asimismo, se ha tenido que encajar el nuevo sistema de retribuciones de los funcionarios, definido en la Ley de la Función Pública.
Una vez que el Gobierno dé el visto bueno definitivo al presupuesto, se necesitan 10 días para elaborarlo y redactarlo y que esté presentable para ir al Congreso de los Diputados. Según fuentes de Hacienda, si el proyecto fuese cerrado hoy en Consejo, hasta finales de la próxima semana no podría entrar en las Cortes. Sin embargo, en el departamento confían en que la infórmatización del proceso acelere su terminación técnica. El artículo 134 de la Constitución determina que "El Gobierno deberá presentar ante el Congreso de los Diputados los Presupuestos Generales del Estado al menos tres meses antes de la expiración de los del año anterior". El retraso en la aprobación y en la presentación ha motivado que Boyer no asistiese, en representación de España, a la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional. Según un portavoz de Hacienda, el ministro "está especialmente preocupado por las consecuencias que se pueden derivar del retraso en la firma del AES para los plazos de presentación del presupuesto en las Cortes".
Poco margen
En la conferencia de prensa dada por Felipe González en Valencia, el presidente comentó, según informa Manuel Muñoz, la relación entre el AES y los presupuestos: "Haremos esfuerzos para acabar inmediatamente, pero todavía tendremos un poco de margen aunque tengamos que retrasar probablemente en unos cuantos días la propia presentación de los presupuestos. La verdad es que el Gobierno ha hecho un enorme esfuerzo por que se firme el acuerdo socioeconómico. Sobre todo, porque a mi juicio, tiene una importancia de contenido y una importancia psicológica: da tranquilidad. Y la importancia psicológica de este año tal vez tenga incluso más valor que la importancia del contenido".
Significó González que afirmaba eso "porque los salarios van a caminar al nivel de los precios, y por tanto, la teoría del sacrificio salarial este año no es tan importante como otros en los que ha habido que hacer un ajuste. Y por otra parte, porque para los empresarios, parte de las reivindicaciones empresariales, digamos que ya son hechos adquiridos. La modificación del Estatuto de los Trabajadores, por una parte, y por otra parte, una cierta tendencia a la bija en el precio del dinero. Por tanto, las partes sociales no aportan tanto a este acuerdo social -no digo que no aporten nada- como podría resultar de beneficios psicológicos para el conjunto del país que hubiera un acuerdo. El Gobierno está haciendo el máximo esfuerzo para que lo haya. Porque nos parece bueno para todos. Empezando, ¿por qué no confesarlo?, por el Gobierno. Pero yo creo que es mucho más importante para el país que para el Gobierno, y tengo la esperanza todavía de que podamos conseguir algo.
Valoración positiva
Es significativo el hecho de que la presencia de Felipe González en Valencia haya sido valorada por los empresarios de la zona de forma absolutamente positiva. En un comunicado hecho público por la Confederación Empresarial Valenciana, vinculada a la cúpula patronal CEOE, se afirma que "los empresarios valencianos están entusiasmados por el camino de confianza, fortalecimiento y ánimo que el presidente González ha abierto para los empresarios", informa Efe.
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