La propuesta de negociación del Gobierno a ETA

El problema de ETA hace tiempo que está llegando al principio del fin. El espectacular cambio de postura del Ministerio del Interior aceptando mantener un encuentro -público o privado, sin los intermediarios que hasta ahora han intervenido- con los máximos dirigentes de ETA es un reconocimiento de que la salida al terrorismo, para ser duradera, ha de ser negociada.Voces como las de Bandrés se levantaban pidiendo negociaciones para una organización que -recordaba- también había contribuido a la democratización del país, y por la que muchos demócratas en épocas anteriores se habían movilizado por ella, y como ejemplo baste recordar el proceso de Burgos. Determinadas pastorales de los obispos vascos y la misma postura del Gobierno de Ajuria Enea o del PNV han servido de puente para que se culminara con el ofrecimiento de diálogo. ( ... )

Somos conscientes de que hay heridas que dificultan enormemente este proceso e incluso puede llegar a crispar el simple anuncio de su inicio. Hay cuerpos como la Policía Nacional, el Ejército y la Guardia Civil que han sufrido en su _propia carne la actuación de ETA. Ésta, por su parte, también tiene sus víctimas. Ahora se trata, como se ha hecho con los polis-milis, de saber trocar estos legítimos sentimientos por posturas que puedan permitir una salida digna que acabe con uno de los más graves problemas actuales. No se trata de revivir insólitos abrazos de Vergara, sino de hacer un esfuerzo por parte de todos para permitir encontrar una salida aceptable a los que eligieron implantar sus ideas por la razón de una fuerza que también, afortunadamente, les ha fallado. ( ... ) Ahora nos podemos encontrar ante una oportunidad histórica que sería triste que se desperdiciara. ( ... )

, 24 de agosto