Edén Pastora: "Ofrezco a Daniel Ortega dejar las armas si él depone su actitud dictatorial"

Edén Pastora, de 47 años, dice que no cuenta con el apoyo de la Agencia Central de Inteligencia norteamericana (CIA) en su lucha de guerrillas contra el régimen sandinista desde la frontera sur de Nicaragua. Asegura que sólo tiene apoyos personales. Él mismo ha puesto en venta la sortija que le regaló Omar Torrijos, la cadena que le dejó su padre en herencia y el reloj de oro con que le obsequiaron cuando asaltó el palacio legislativo de Managua. En Madrid, donde se entrevistó el miércoles con Felipe González, ha ofrecido al máximo dirigente nicaragüense, Daniel Ortega, abandonar las armas a cambio de que acabe con Ia dictadura marxista-leninista-estalinista".

Pregunta. Francamente, sorprende verle así vestido, con traje y corbata.Respuesta. No, yo soy un político. Mi sueño es dedicarme a educar a mis hijos, hacerle el amor tranquilamente a mi mujer, llevar una vida normal, pero eso sólo se logrará cuando en Nicaragua tengamos libertad; la que creímos haber alcanzado el 19 de julio y que se nos cayó en dos años. Recuerdo cuando vimos reprimir a nuestros campesinos sólo porque Henry Ruiz (ministro de Planificación) cayó en el dogmatismo de que había que proletarizar a los campesinos para crear una sola clase obrera.

P. La otra idea que se tiene sobre usted es la de que está apoyado por la CIA.

R. No tenemos apoyo de la CIA. Basta ver a nuestras tropas descalzas, con harapos, hambrientas, escuálidas, para darse cuenta. Basta ver que Robelo se fue, que Chamorro se fue para darse cuenta de que no tenemos apoyo de la CIA. Basta ver nuestra postura crítica a las intervenciones extranjeras.

P. ¿No recibe ningún tipo de apoyo de EE UU?

R. No. Nosotros subsistimos por la ayuda de nuestro pueblo, aunque la ayuda personal es muy poca y necesitamos más y más recursos. Hoy por hoy llevamos seis meses sin recibir una bala, un uniforme. Actualmente estamos luchando en una guerra de guerrillas por la logística muy limitada que tenemos.

P. ¿Qué puede ofrecerle usted a Daniel Ortega?

R. Yo ofrezco dejar las armas si él depone su actitud dictatorial, si él depone su actitud de implantar en Nicaragua una revolución de corte totalitario marxista-leninista-estalinista.

P. ¿No se le ha ocurrido volver a Nicaragua abiertamente, como hizo Wilson Ferreira en Uruguay?

R. Es que en Uruguay no hay una dictadura de ultraizquierda. Si Wilson Ferreira hubiese llegado a una dictadura de ultraizquierda, lo hubieran fundido en ácido como hacían los cubanos con los opositores.

P. ¿Apoya usted las gestiones que lleva a cabo estos días Arturo Cruz en Managua para coseguir un acuerdo entre el Gobierno y la oposición?

R. Nosotros apoyamos completamente la gestión del compañero Arturo Cruz. Creemos que es el hombre ideal para un proyecto de unidad nacional que garantice la democracia.

P. ¿Cree usted que hay posibilidades de acuerdo?

R. Lo importante es que el Gobierno cumpla lo que se acuerde. Vamos a ver si el Gobierno de Nicaragua expulsa a 3.000 militares cubanos y a dos generales cubanos que constituyen una auténtica intervención. Dos generales cubanos, el general Arnaldo Ochoa y el genera Quintelán, no son otra cosa que los William Walker moderno (antiguo filibustero norteamericano que llegó a ser presidente de Nicaragua en 1856). Pedimos como condición sine qua non que salgan estos militares.

P. ¿Cuáles son sus exigencias mínimas para aceptar el proceso electoral en Nicaragua?

R. Para que se dé un proceso de elecciones democráticas exigimos un espacio de tiempo suficiente para que se pueda hacer una auténtica campaña, con libertad de prensa irrestricta.

P. ¿Se le puede seguir llamando jefe de las fuerzas de ARDE, o ha sido expulsado?

R. Soy el comandante de las fuerzas de ARDE, porque ARDE son 8.000 hombres, ARDE es un pueblo que lucha, ARDE está compuesta por seis organizaciones, de las cuales se salieron dos: la del negro Chamorro y Robelo, que no tiene tropas. Los otros cuatro hemos quedado dentro de la verdadera ARDE, una ARDE popular que sigue defendiendo el proyecto político de rescate de la revolución popular sandinista.

P. ¿Cuál es su opinión sobre Robelo?

R. Robelo empezó por el rescate de la revolución popular sandinista; después cambió y siguió por el rescate de la revolución sandinista; luego por el rescate de la revolución; ahora va por el rescate de Nicaragua; mañana va a ir por el rescate de Puntañata que son sus haciendas.

P. ¿Usted no está de ningún modo dispuesto a un acuerdo con el FDN?

R. No estamos dispuestos a llegar a alianzas con los genocidas que nos asesinaron durante 45 años.

P. ¿Aceptaría usted un cargo político con otro régimen?

R. Más que eso, yo quiero jubilarme, pero si me obligan a un puesto político de ascensorista en la casa de Gobierno, lo desempeño y muy bien.

P. ¿Qué es, entonces, lo que más le gustaría hacer ahora?

R. Anhelo vivir en paz. No quiero seguir llamando a los jóvenes a la guerra. Yo mismo tengo a mis hijos en la guerra.

P. ¿Cuántos hijos tiene usted?

R. Bueno, con mi última esposa ocho.

P. ¿Y en total?

R. Veinte.

P. ¿Cuántas esposas ha tenido?

R. Cuatro. Es consecuencia de la lucha, es duro vivir con uno, pobre. Es difícil ser la mujer de un revolucionario. Entonces, en esta lucha he perdido tres esposas y he ganado muchos hijos.

P. ¿Quién es su última esposa?

R. Es una india campesina que me ha aguantado 19 años de pobreza. Ella es la que me ayuda a curarme de mi atentado.