Hacienda recaudó 126.000 millones de pesetas por las declaraciones positivas del impuesto sobre la renta de las personas físicas

La recaudación de Hacienda por el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) de 1983, según los primeros datos provisionales correspondientes a las declaraciones positivas presentadas hasta el 11 de junio pasado, ha ascendido a 126.000 millones de pesetas, con un incremento del 27% sobre las cifras alcanzadas en el ejercicio anterior, según informó ayer en conferencia de prensa el secretario de Estado de Hacienda, José Borrell. Altos cargos del ministerio hicieron balance, en esta comparecencia, de la campaña contra el fraude durante los primeros cinco meses de 1984: la acción inspectora ha detectado 64.000 millones de pesetas de deuda tributaria, cifra que duplica la de igual período de 1983.José Borrell indicó que la recaudación en concepto de cuota diferencial del IRPF (de los contribuyentes que ingresaron el 100% de ésta y el 60% correspondiente al primer plazo) ha pasado de 99.900 millones en 1983 a 126.000 millones este año. Este incremento -un 27%- será aún mayor a finales de año, según el secretarío de Estado, ya que queda por recaudar a muchos contribuyentes, que se han acogido al pago aplazado del impuesto, un 40% de las cantidades debidas a Hacienda.

El secretario de Estado señaló que todavía no se conoce el número de declaraciones con derecho a devolución ni el importe global de los reintegros que deberá realizar Hacienda. No obstante, añadió, "cabe esperar que las declaraciones con solicitud de devolución disminuyan en su importe respecto al ejercicio anterior" debido al aumento en la tarifa del impuesto y a la tardía entrada en vigor -el 1 de junio del 83- de la nueva tabla de retenciones, así como su reducida incidencia (afectó a rendimientos de trabajo inferiores a los dos millones de pesetas anuales).

Lucha contra el fraude

Respecto al impuesto sobre el patrimonio, según Borrell, el resultado ha sido aún más positivo. "La recaudación para 1984 se cifra en 17.000 millones de pesetas, lo que supone un incremento superior al 40% respecto a 1983, año en que la recaudación por este concepto se elevó a 12.000 millones de pesetas". El secretario de Estado de Hacienda se mostró muy satisfecho por la evolución de las recaudaciones, "que han superado las previsiones más optimistas", aunque indicó a renglón seguido que sólo en la medida en que cambie el peso de las distintas rentas en, el rendimiento neto del impuesto (las rentas de trabajo suponen el 85%) se podrá hablar de éxito en la lucha contra el fraude.Durante los cinco primeros meses del ejercicio actual se ha acentuado la actuación inspectora contra el fraude fiscal, indicó Borrell, incrementándose en un 37% el número de actas levantadas (103.000, frente a las 75.000 del pasado año), así como los efectivos humanos dedicados a estas labores (la plantilla de inspectores y subinspectores creció un 35%). Fruto de este esfuerzo, la deuda tributaria detectada (64.000 millones de pesetas) supone duplicar las cifras de 1983.

"Este excelente resultado", indicó el secretario de Estado, "se ha obtenido no solamente por la dedicación de un mayor número de personas a esta actividad y por el aumento de su productividad individual, sino también y fundamentalmente por una más adecuada y estudiada selección de contribuyentes". El plan especial de lucha contra el fraude, dijo Borrell, se inició a mediados de noviembre y se ha desarrollado en dos vertientes: actuaciones territoriales y actuaciones sectoriales.

Las actuaciones territoriales se han centrado fundamentalmente en los peinados fiscales, consistentes en visitas a contribuyentes con establecimiento abierto en municipios previamente seleccionados. En estas actuaciones, en el período enero-mayo, se comprobó la situación fiscal de 120.610 contribuyentes, observándose que sólo un 52% de los mismos cumplía perfectamente sus obligaciones fiscales.

Las actuaciones sectoriales, que se han centrado en la investigación y comprobación de contribuyentes seleccionados sistemáticamente, han puesto de manifiesto que sólo una de cada cuatro personas inspeccionadas se encontraba en situación fiscal adecuada. Por estas actuaciones, que han afectado a 28.912 contribuyentes, se han levantado 43.054 actas, que han supuesto una deuda tributaria de más de 42 millones de pesetas.

El secretario general de Hacienda, Juan Francisco Martín Seco, y el director general de Inspección Tributaria, que acompañaban a Borrell en la conferencia de prensa, explicaron a continuación los nuevos planes de actuación contra el fraude. Las actuaciones futuras, dijeron, se realizarán en tres ámbitos: planes coordinados desde el centro directivo, planes de apoyo a la gestión y planes autónomos de cada delegación. Los primeros, los planes coordinados, se refieren a actuaciones apoyadas en un estudio de sector o actividad, una toma de datos y una relación de contribuyentes.