El Gobierno aprueba un plan de investigación en física de altas energías para rentabilizar el reingreso de España en el CERN
España pretende doblar en los próximos cinco años el número de equipos de investigación en física de altas energías para situar a este campo de la ciencia en un lugar comparable al de la media de los países europeos. Para lograr este objetivo la comisión interministerial de Programación ha aprobado recientemente un plan movilizador, de cinco años de duración, con unas inversiones totales previstas de 4.000 millones de pesetas.
El plan movilizador de física de altas energías tiene como objetivo fundamental rentabilizar el reingreso de España en el Centro Europeo de Investigación Nuclear (CERN), que se ha producido hace unos meses tras una ausencia de 15 años, según se puso de relieve en la presentación del plan ante científicos e industrias, en un acto organizado por la Asociación de Personal Investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). El CERN es el organismo que centraliza la investigación en fisica de altas energías de todos los países europeos, a excepción de Portugal y Grecia. Tiene un gran prestigio, y en sus instalaciones se ha logrado recientemente el descubrimiento de dos nuevas partículas elementales, los bosones W y ZO.El plan elaborado por la Comisión Asesora de Investigación Científica y Técnica (CAICYT) es el primero de este tipo que se pone en marcha en España. Establece unos objetivos concretos, la financiación para conseguirlos y los métodos de seguimiento para su evaluación y posible modificación.
Como objetivos, se pretende que al menos se doble el número de grupos experimentales, pasando de los tres actuales -uno potente en la Junta de Energía Nuclear (JEN) y dos con menos medios en las universidades de Valencia y Santander- a un número no inferior a seis.
Juan Antonio Rubio, director de investigación de la JEN y coordinador del grupo de trabajo que ha elaborado el plan, señaló que se trata sobre todo de evitar el sesgo exclusivamente teórico a que tiende la ciencia en España debido a la falta de infraestructura suficiente. Esta infraestructura, en el caso de la física de altas energías, es muy costosa, lo que explica la decisión europea de investigar de forma conjunta.
Aunque España pagará hasta 1988 sólo el 30% de la cuota que le correspondería en el CERN -en 1983 el importe fue de 900 millones de pesetas-, el plan pretende que estas cantidades sean rentables para el país. Para ello se ha previsto en el plan que exista una máxima promoción de los posibles contratos para industrias españolas que se adjudiquen en el CERN y que en sus instalaciones se forme personal técnico. Otro aspecto previsto es el aumento de personal español en el CERN. de 30 a unas 200 personas. Por otra parte, el pasado 30 de abril finalizó el plazo de la primera convocatoria de proyectos de colaboración con el CERN para ser subvencionados por la CAICYT.
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