Paco Ojeda, desbordado

Paco Ojeda ha hecho todo lo posible para, de seguir así, quedarse hasta sin detractores. Ha sido la vez que peor se le ha visto. Totalmente desbordado por la bondad de su primero y los problemillas, del quinto, que tenía geniecillo y echaba la cara arriba, le ha faltado hasta valor para, al menos, intentar taparse.Emilio Muñoz cuando montaba sus faenas sobre moldes artísticos, sacando a relucir su indudable buen gusto, el personal bostezaba y no coreaba nada porque todo era irreal, faltaba la emoción del toro de lidia con movilidad. La oreja que le cortó al cuarto no debe suponer argumento válido para hacerle creer a quien no haya visto la corrida que ha sucedido algo serio.

Yiyo, que es capaz de torear con cierto gusto, como lo ha demostrado en unos lances pausados al sexto, igualmente ha fracasado. La falta de entidad de sus toros, unida a la cansina y sosa embestida, no podía alcanzar el éxito.

Los toros, chicos y sin fuerza, sólo podían soportar un puyazo.

Vera triunfa en Barcelona

Juan Carlos Vera fue el mejor en la novillada inaugural de la temporada en Barcelona, informa Ángel Cebrián. Dió vuelta al ruedo en su primer novillo y cortó oreja en el sexto. A ambos los supo torear con empaque, suavidad y temple.Lucio Sandín (aviso y palmas, y ovación), lidió bien al lote más difícil de la tarde. Manolo Cascales (ovación y silencio) se mostró, en cambio, dubitativo y desangelado.

Los novillos, de Montalvo de Salamanca, estuvieron bien presentados y tenían fuerza.