La inflación acumulada durante el pasado año se aproximará al 12,5%, según estimaciones provisionales

El Ministerio de Economía espera que el índice de precios al consumo de diciembre haya aumentado del 1,7% al 2%. Productos energéticos, pescado, pollo y huevos serán las principales fuentes del alza. Si el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirma estas impresiones cuando publique el dato oficial -probablemente la próxima semana-, la subida acumulada por dicho indicador de la inflación en los doce meses del año se situará entre el 12,2% y el 12,5%. Aun con cierto desvío frente al 12% fijado como objetivo por el Gobierno, la Administración económica estima que la ganancia media del poder adquisitivo de los salarios habrá sido de 0,5 % ó 1%, pues no cree en avances mayores detectados por el INE.Los precios al consumo subieron en diciembre de 1982 un 2,2%, hasta situar la inflación acumulada en el 14,1%. En aquella ocasión coincidieron dos elementos que en 1983 han tenido distinto comportamiento, si bien se neutralizarán. Por una parte, el índice tomado como base de comparación -noviembre- creció 0,3 puntos -nivel poco frecuente por esas fechas en años anteriores-, y en 1983 ha sido del 1%. Por otra, la revisión de precios energéticos se ha quedado en la mitad (10%, frente al 20% de entonces).

Pero todavía habrá de computarse en diciembre último, habitualmente uno de los meses más alcistas del año, una incidencia de los precios energéticos superior a medio punto. Además, todos los indicios apuntan a que ha persistido la aceleración iniciada tras el verano en los precios de algunos alimentos, en especial los de mayor consumo en las Navidades (pescado, marisco, etcétera) y los que dependen de importaciones (entre ellos, los de ganados que consumen piensos), afectados por el alza del dólar. Otros de gran influencia en la cesta de la compra media, como el pollo y los huevos, fueron también influidos por la caída de la producción.

Así, en los informes oficiales de coyuntura se ha empezado a incluir desde esta semana una subida media anual del índice de precios del 12,2%, dando por desbordadas las previsiones del Gobierno, que a la vista del primer semestre llegó a confiar al empezar el verano en rebajar la inflación este año al 11%. El dato, sin embargo, y al contrario de lo que ocurre en muchos países, donde los sindicatos utilizan la misma forma de cálculo, ha sido estimado con las medias mensuales de los doce índices, no con la acumulación de las variaciones mes a mes.

Subida a fin de año

Si el año 1982 se hubiera utilizado el mismo sistema, la inflación oficial, que fue del 14,1%, hubiera quedado en el 14,4%. Ahora ocurre lo contrario con 1983, debido a que las alzas se han concentrado en los últimos meses. La media por meses es del 12,2%, pese a que la Administración da por buenas estimaciones cuyo cumplimiento situaría el índice acumulado a finales de diciembre en cerca del 12,5%. Aceptada la forma más extendida en otros países -14,4% y 12,2% en España-, la inflación habrá bajado 2,2 puntos, mientras que en años anteriores sólo descendió 0,2 puntos en 1980 y 1982 y 0,9 puntos en 1981. Pero se ha mantenido exactamente el nada benigno diferencial con respecto a la media de los países de la OCDE, donde ha bajado del 7,8% al 5,6%, y también sobre la zona europea, donde ha caído del 10,5% al 8,3% en promedio.

Según fuentes del Ministerio de Economía, sin un alza tan fuerte como la padecida por España, la rebaja podría haber sido de hasta 4 puntos más. Este dato sale de que los precios en pesetas pagados por las compras al exterior durante 1983 (el equivalente a unos 28.300 millones de dólares) han subido en promedio el 21,5%, y de que las importaciones suponen un 20% del producto interior bruto.

El problema es que este efecto negativo persiste en el primer mes de 1984 y puede mantenerse por algún tiempo más.