Los bronces de Riace se expondrán en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles

Los bronces Los guerreros de Riace, que hoy son el orgullo del Museo de Regio Calabria, tras haber tenido el honor de ser las únicas estatuas huéspedes durante 15 días del palacio presidencial del Quirinale en Roma, van a ser, con toda probabilidad, el símbolo de los próximos Juegos Olímpicos de Los Ángeles. La decisión tendrá que tomaría dentro de unos días el presidente del Gobierno, Bettino Craxi, con los ministros competentes en el asunto, pero ya el ministro del Turismo, el socialista Lelio Lagorio, ha dado su parecer favorable subrayando que la presencia de estas joyas escultóricas en Los Ángeles podrían favorecer grandemente el incremento del turismo en Italia.La hipótesis de trasladar los bronces de Riace a Los Ángeles, ha sido presentada por Robert Fitzeatrick, director del Festival de las Artes, que tendrá lugar en el mismo período de los Juegos Olímpicos.

En una carta dirigida a las autoridades italianas el alcalde de Los Ángeles, Thomas Bradley, ha afirmado que tanto el Gobierno de los Estados Unidos como su ciudad están dispuestos a recibir a los famosos atletas de bronce con todos los honores que se merecen y con las máximas garantías de seguridad.

La dos estatuas serían colocadas en el Museo de Arte Moderno, situado a unos cientos de metros del estadio. Y se calcula que serán admirados por más de 300 millones de personas, ya que la intención es que los bronces aparezcan en la televisión cada vez que, durante las olimpiadas, se haga una conexión en Mundovisión.

Atletas gigantes

Y se asegura que mucha gente que no hubiera visto los Juegos Olímpicos de Los Ángeles porque, no es aficionada al deporte, abrirá el televisor sólo para gozar de la espléndida desnudez de los gigantes atletas griegos cargados ya no sólo de historia arqueológica y de innegables valores artísticos, sino también de mitos, magia y superstición. Se asegura que sólo con mirarlos ya te llega la suerte. Quien ha conseguido tocarlos afirma que hasta hacen milagros. Y en Calabria se habla de casos de impotencia masculina y de frigidez femenina curados milagrosamente con la sola "contemplación" de esos dioses griegos.

Por ahora, el único problema para que los bronces de Riace se conviertan en el símbolo de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles es la burocracia italiana. La región de Calabria es muy celosa de quedarse unas semanas sin sus dioses de bronce. ¿Y si en esos días se produjese por ejemplo un terremoto? Y ya han alegado que uno de los bronces "está enfermo".

Las autoridades han puesto el asunto en manos del ministro de Bienes Culturales. Probablemente se desencadenará ahora la clásica guerra de competencias. Es lo que temen los norteamericanos, quienes se han lamentado ya de la lentitud de la burocracia italiana y han exigido una respuesta inmediata. Por eso es posible que en los próximos días el presidente del Gobierno, Craxi, que no es hombre a quien le gustan las soluciones lentas, pueda zanjar positivamente la cuestión.