Los pacifistas alemanes contestan al debate sobre euromisiles con su 'semana de ira y resistencia'
Con la policía en estado de alerta para impedir acciones; de los pacifistas, comienza hoy en el Parlamento de la República Federal de Alemania (Bundestag), en Bonn, un debate de dos días sobre el estacionamiento de los misiles de la OTAN. Los partidos de la coalición de Gobierno, de centro-derecha, democristianos y liberales (CDU-CSU y FDP) apoyan la doble decisión de la OTAN y el despliegue de los misiles Pershing 2 y de crucero en la RFA, que rechazan los partidos de la oposición, socialdemócratas (SPD) y verdes.
En el barrio del Gobierno dé Bonn, la policía patrullaba ya ayer por la tarde y se veían multitud de barreras metálicas para controlar todos los accesos a la zona. En una autopista de acceso a Bonn circulaba una columna de 25 vehículos policiales, procedentes de Dortmund, para reforzar a la policía de la capital federal.Los pacifistas han anunciado que ésta será la semana de ira y de resistencia, y convocaron a participar en acciones no violentas de desobediencia ciudadana y bloqueo pacífico del Bundestag, donde hoy se inicia el debate sobre los misiles. Se espera una mayoría amplia de los partidos del Gobierno, favorables al estacionamiento.
El debate tiene un carácter puramente académico, porque el Gobierno ya anticipó que el estacionamiento está fijado en la doble decisión de la OTAN y no requiere una ratificación parlamentaria. Los pacifistas se reunieron ayer por la tarde en el instituto Beethoven, de Bonn, donde un parlamento de la mayoría aprobó una declaración de Bonn, en la que anuncian que "no reconocemos la resolución del Bundestag. Negamos al Gobierno federal el derecho a ignorar a la mayoría de la población en un tema que afecta a la misma existencia". Los organismos coordinadores del movimiento pacifista declaran que "una mayoría de la población rechaza el estacionamiento. Con la resolución favorable al despliegue de los misiles, el Bundestag comete un error de consecuencias históricas".
El ministro federal del Interior, el derechista Friedrich Zimniermann (CSU), advirtió hace unos días contra el terrorismo psicológico de los que "intentan impedir con un bloqueo del Bundestag el libre ejercicio del voto a los diputados libremente elegidos".
Intervención del canciller
Zimmermann advirtió contra el potencial violento de unas 10.000 personas de los llamados grupos autónomos dentro del movimiento pacifista. Los organizadores de las acciones de bloqueo pacífico del Bundestag anunciaron que obedecerán las órdenes de la policía y no se dejarán provocar. La policía federal de fronteras (BGS), que depende del Gobierno federal, está dispuesta por si fuera necesaria su intervención.
El debate en el Bundestag se abrirá con una intervención del canciller de la República Federal de Alemania, el democristiano Helmut Kohl (CDU), a quien responderá el jefe del grupo parlamentario socialdemócrata, Hans-Jochen Vogel (SPD). El segundo de los oradores del SPD será el ex canciller Helmut Schmidt, que tomará la palabra en el Bundestag por primera vez desde su cese hace 13 meses. Schmidt anunció que no votará a favor de la resolución que presenta el Gobierno, aunque en el congreso del SPD que concluyó el sábado en Colonia, quedó en una posición minoritaria favorable a la doble decisión de la OTAN. Lo más probable es que Schmidt y los diputados socialdemócratas que le apoyan se abstengan en la votación del martes. Los verdes concluyeron ayer su asamblea federal en la ciudad de Duisburgo, donde unos 900 delegados aprobaron que la RFA deberá salir de la OTAN, la disolución de los pactos militares y el desarme. unilateral de los países con armas atómicas.
Ayer se dio a conocer en Bonn que el dirigente soviético Yuri Andropov envió una carta a Kohl sobre las conversaciones de desarme de Ginebra. El portavoz del Gobierno federal alemán, Peter Boenisch, calificó, la carta de "objetiva y sobria", y añadió que reafirma las posiciones soviéticas ya conocidas. La carta, que entregó el embajador de la URSS el viernes en la cancillería federal en Bonn, no contiene ningún elemento que permita llegar a la conclusión de que Moscú renuncia a contabilizar en Ginebra los arsenales nucleares del Reino Unido y de Francia, tal como anunció Kohl en un programa de televisión la noche del jueves, lo que creó una confusión considerable. Andropov insiste en echar la culpa a Occidente del fracaso de las negociaciones de Ginebra y expresa el interés en mantener los contactos y buenas relaciones entre la RFA y la URSS.
