100.000 personas agonizan diariamente de hambre en el mundo por una mala distribución de los alimentos

Casi 100.000 personas agonizan diariamente de desnutrición en el mundo; cada dos segundos muere un niño por falta de alimentos; 1.000 millones de seres humanos están mal alimentados. Una vez más este año se repiten estas cifras en torno a la celebración, ayer domingo, del Día Mundial de Alimentación, que promueve la FAO, organismo especializado de la ONU para la alimentación y la agricultura, bajo el lema La alimentación: un derecho prioritario.

En España, país que contribuye al programa mundial de alimentación de la FAO con casi 600 millones de pesetas (a los que habría que añadir otros 30 millones más, el equivalente en pesetas a 30 toneladas de trigo), no hay constancia oficial de que alguien se muera por falta de recursos alimenticios. Todo lo contrario, se despilfarran alimentos como en cualquier otro país industrializado. Este despilfarro se produce como consecuencia de la sobrealimentación que afecta a la mayoría.La dirección general de Política Alimentaria del ministerio español de Agricultura ha querido llamar la atención sobre los graves problemas que se producen en la sociedad de hoy, no tanto por la carencia como por la mala distribución de los alimentos, y ha programado una serie de actos relacionados con esta fecha. Como primera medida, el director de Política Alimentaria, Ismael Díaz Yubero, presentó el viernes pasado los 13 primeros tomos de los 23 que consta la recopilación que ha hecho el Ministerio de Agricultura del Código Alimentario Español.

Ismael Díaz Yubero explica que el problema de los desequilibrios de la alimentación en el mundo no es tanto de falta de producción como de mala distribución de los alimentos. "En primer lugar los países que tienen alimentos de sobra no están dispuestos a darlos a no ser con una serie de contrapartidas. En segundo lugar muchas veces se utiliza esta donación como arma de penetración. Tampoco se pueden olvidar los problemas que tienen los países receptores de las ayudas, especialmente cuando estas ayudas no llegan a su destinatario porque se quedan en manos de particulares encargados de repartirlas".

El director de Política Alimentaria añade que el problema es muy complejo y sigue normalmente tres procesos. "Muchas veces lo que los países ricos dan a los pobres no es lo que éstos necesitan sino lo que les sobra a los primeros. Con esta operación se pretende lavar la mala conciencia y a la vez se resuelve el problema de los excedentes. Hay una segunda fase que acomete la construcción de obras públicas destinada a dar medios a estos países pobres para producir alimentos. La tercera etapa se centra en la ayuda tecnológica".

Medios para producir

Alejadas de estas prácticas se encuentran las recomendaciones de la FAO que se centran en que los países ricos sigan la tendencia de no entregar alimentos a los países pobres sino que les proporcionen medios para producirlos. También aconseja la FAO que la cooperación no sea bilateral -de país a país- sino que se haga a través de organismos internacionales. En muchas ocasiones, los países industrializados no suelen seguir estas recomendaciones. España ha mantenido colaboraciones directas de envío de alimentos con Marruecos y en la actualidad gestiona un envío de trigo a Somalia.Transacciones internacionales aparte, el menú diario de la humanidad por persona y día ha sido establecido por un grupo de investigadores holandeses en 3.800 calorías. La dieta media está compuesta por 273 gramos de trigo; 246 de arroz; 269 de maíz; 94 de cebada; 100 de granos diversos; 334 de tubérculos; 25 de legumbres; 210 de vegetales; 168 de frutas; 32 de aceite; 55 de azúcar; 281 de leche y 43 gramos de pescado. Esta dieta equivale a 120 gramos de proteínas; 69 de grasas y 722 de hidratos de carbono. En la dieta no aparecen ni la carne ni los huevos. Sobre el problema de la alimentación en España, el director de Política Alimentaria. cree que existen nuevas tendencias en la alimentación de los españoles. "En los últimos años han cambiado mucho las dietas de alimentación en este país y no precisamente de acuerdo con la oferta y las necesidades del mercado. Antes había unos pocos que comían mucho más de lo que necesitaban y otros muchos que comían poco. Ahora la gente está aprendiendo a comer".