Los rebeldes angoleños liberan a 35 personas que tenían secuestradas

La Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA) entregó ayer a la Cruz Roja Internacional, en Johanesburgo, a 35 rehenes capturados en el sur de Angola por los guerrilleros hostiles al régimen socialista de Luanda. El portavoz de la Cruz Roja precisó que entre los cautivos figuran 21 adultos y 14 niños. No se descarta que entre los liberados, que deben viajar a Lisboa hoy, figuren los religiosos presos hace un mes y dos monjas españolas.

Según una fuente oficial de Lisboa 20 portugueses figuran entre los presos liberados por UNITA y no se conoce la nacionalidad de los restantes. El portavoz del movimiento guerrillero de Jonás Savimbi -apoyado por el régimen surafricano- dijo que no figura ningún checoslovaco en el grupo ahora entregado a la Cruz Roja para ser repatriado. En un comunicado divulgado ayer en la capital portuguesa, UNITA acusa al Gobierno de Luanda de haber ejecutado o dado muerte mediante tortura a 361 de sus militantes capturados por las tropas angoleñas.

El comunicado de UNITA añade que la arrogancia del régimen de Luanda le obliga a cambiar su posición acerca de los rehenes y a suspender las visitas de representantes de organizaciones humanitarias a los extranjeros presos por la organización de Jonás Savimbi. El movimiento rebelde exige ahora que los presos políticos en poder del régimen de Luanda puedan ser visitados por la Cruz Roja, y amenaza, de lo contrario, con ejecutar a los técnicos checoslovacos en su poder desde marzo pasado.

Hasta ahora, UNITA había liberado sin condiciones a todos los ciudadanos de países no comunistas capturados en Angola. En junio soltó a 43 de los 76 checoslovacos secuestrados cerca de Moamedes, mujeres y niños enfermos. El comunicado de UNITA concluye diciendo que el comportamiento de las autoridades angoleñas refuerza la determinación de los guerrilleros de "entrar en Luanda antes del fin del año en curso" y de "ocupar en masa esta provincia".