La subida del precio de los productos energéticos no es inmediata y no será muy elevada, según Boyer

Los precios de los productos energéticos no van a ser modificados con carácter inmediato y dependen de la evolución que siga el dólar en su tipo de cambio, manifestó el titular de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, en el transcurso de la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros celebrado ayer. El ministro analizó los principales indicadores de la economía española en el primer semestre del año que serán estudiados hoy en el Consejo de Ministros que se celebrará bajo las presidencia del rey Juan Carlos I. Según estas cifras, la economía española creció el 1,7% durante el primer semestre del año.

Miguel Boyer señaló que el Consejo de Ministros no había estudiado una posible subida del precio de los productos energéticos aunque reconoció que el ministerio sigue puntualmente la evolución de dicho sector, y no sólo por motivos fiscales. La evolución del tipo de cambio de la peseta frente al dólar fijará el momento de modificar los precios de los derivados del petróleo que, en cualquier caso, será inferior a la experimentada en diciembre pasado. Miguel Boyer declaró que esto era posible porque a finales del año pasado hubo que proceder a una subida muy importante al haber estado artificialmente congelados los precios de la gasolina en el año y medio anterior.La evolución de la economía española a lo largo del primer semestre fue considerada como safisfactoria por el ministro de Economía y Hacienda quien expuso las principales cifras del informe que presentará al Consejo de Ministros que se celebra hoy en Palma de Mallorca. Según estos datos el crecimiento económico del primer semestre se estima en el 1,7%, relativamente cercano a las previsiones que para el conjunto del año hizo el Gobierno en los primeros días de 1983.

Este crecimiento se ha apoyado en un mayor incremento de lo previsto de la demanda interior -1,3%-, y a pesar de que la demanda externa ha crecido por debajo de lo previsto -las exportaciones de bienes y servicios han aumentado el 4,8% en términos reales mientras que las importaciones lo han hecho en el 2,5%. Las previsiones iniciales se cifraban en un crecimiento del 5% de las exportaciones y en una caída de las importaciones del 1,5% sobre los niveles del año anterior.

La evolución de la inflación -11,3% en el primer semestre del año- representa una rebaja del 0,7% por encima de lo previsto por el Gobierno y ha ayudado a que se reduzca el diferencial de precios existente entre la economía española y la del conjunto de los países miembros de la OCDE. Para el ministro de Economía la apreciación del dólar a lo largo del año ha supuesto tres puntos de inflación como consecuencia del impacto de los precios de los productos importados en el índice general de precios.

El crecimiento económico del 1,7%, a pesar de la tasa de inflación, ha permitido, según Miguel Boyer, un ligero incremento del empleo y una tímida, reducción del paro, según los datos de la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística. Estas cifras señalan, al término del primer semestre, que la población ocupada ha crecido en 21.000 personas y que el número de parados ha descendido en 18.000 trabajadores, colocando la tasa de desempleo en el 17,2% en junio cuando a finales del año pasado era el 17,4%.

El ministro de Economía señaló en su intervención que, con datos de finales de julio, la pérdida de divisas como consecuencia de los desequilibrios de la balanza de pagos se sitúa en 1.540 millones de dólares, cifra similar a la del mismo período del año anterior y que confía en una cierta recuperación en el segundo semestre ya que se está reduciendo de forma importante el déficit de la balanza comercial española. Miguel Boyer afirmó que el Gobierno mantiene sus objetivos contenidos en el cuadro macroeconómico -reducción de la inflación, crecimiento económico del 2% para el año y recorte del déficit de balanza de pagos- dada la evolución de la coyuntura durante el primer semestre.