Joan Fuster no podrá ser nombrado catedrático

El escritor valenciano Joan Fuster no podrá ser nombrado ya catedrático extraordinario por la universidad de Valencia, debido a que tras las vacaciones estivales no existirá el consejo de rectores y habrá desaparecido la vía prevista en el Real Decreto 1.943/79, de 3 de agosto, que lo hacía posible.Esta afirmación está contenida en una carta dirigida por el jefe del gabinete de prensa del Ministerio de Educación y Ciencia, Miguel Barroso, al rector de la universidad de Valencia, Joaquín Colomer, que ha hecho pública el ministerio.

Educación y Ciencia sale con ello al paso de la decisión, adoptada en la última reunión de la junta de gobierno de la universidad de Valencia, en el sentido de que el posible nombramiento de Fuster sería estudiado en una próxima reunión del órgano rector universitario valenciano.

"Fuesen cuales fueren las razones que han impedido tomar en consideración la propuesta del nombramiento de Fuster el pasado 17 de julio", indica la carta con referencia a la fecha de la última reunión del consejo de rectores, "la tramitación de ésta ya no será posible nunca". En la carta se añade, no obstante, que "lo que sí será posible a partir de la aprobación de la LRU es que la universidad de Valencia, en uso de la autonomía que la nueva Ley Orgánica le otorga, y de acuerdo con su artículo 33.3, proceda al nombramiento de Joan Fuster como profesor asociado".

La facultad de Filología de la universidad de Valencia había formulado por primera vez la propuesta de que Fuster fuese nombrado catedrático en febrero de 1982.

A ella se adhirieron otras facultades valencianas y fueron recogidos varios miles de firmas en su apoyo, entre las que se cuentan las de los alcaldes de las principales capitales de las zonas de habla catalana (Perpiñán, Lérida, Gerona, Barcelona, Tarragona, Palma de Mallorca, Castellón de la Plana, Valencia y Alicante).

Colomer alegó que no era posible el nombramiento de Fuster por no estar en posesión del título de doctor, para lo que se apoyaba en un acuerdo del consejo de rectores adoptado cuando era ministro Mayor Zaragoza. La facultad optó por contratarlo como profesor no numerario, con carácter provisional, situación académica en la que permanece.