Los creadores reclaman el control intelectual sobre su obra

Los creadores intelectuales se han cansado ya de su imagen de bohemios malvivientes que renuncian voluntariamente a la seguridad social o cualquier otro derecho laboral. Quieren vivir de su arte y tener todo el control personal que les corresponde sobre la obra creada, según coincidieron en manifestar los participantes en la mesa redonda celebrada el pasado martes en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, en la que se habló de la ley de propiedad intelectual que en estos días se discute en el Ministerio de Cultura.La mesa redonda había sido convocada por la Sociedad General de Autores de España (SGAE) y la Asociación Colegial de Escritores. El escritor Ángel María de Lera moderó las intervenciones del asesor jurídico de la SGAE, Antonio Delgado; el pintor Pedro García Ramos, y el poeta Juan Mollá. El moderador justificó el acto narrando un hecho que consideró orientativo de la progresiva marginación de los creadores: la exclusión, por primera vez, de los escritores en la comisión organizadora de la Feria del Libro de Madrid.

Poco optimismo

La inclusión del sector en la comisión que trabaja en la futura ley de propiedad intelectual no es, en principio, señal de gran optimismo, ya que las reuniones son meramente informativas, sin que exista ningún compromiso por parte de la Administración de materializar legalmente las peticiones de los escritores y de los artistas plásticos.

Los participantes enumeraron los agravios que sufre un sector que está amparado por una ley de más de un siglo de antigüedad. Como dato orientativo de la inseguridad en que se mueven, Pedro García Ramos afirmó que no más de un 20% subsiste a base de ocupaciones que nada tienen que ver con la creación. La falta de seguridad social, el no tener derecho sobre la plusvalía generada por su propia obra, la libre disposición que los editores hacen de su obra, fueron sólo unas cuantas de las numerosas quejas.