Descubren en Burgos un yacimiento de la cultura campaniforme

En el pueblo de Villalonquéjar, dentro del término municipal de Burgos, acaba de ser descubierto un importante yacimiento de la época campaniforme que, por sus características, parece tratarse de un poblado de esa cultura. De confirmarse este punto, sería el primer poblado campaniforme hallado en la meseta y vendría a demostrar la teoría de que esta cultura tiene su origen en los pobladores de cuevas del sistema ibérico, Soria y Burgos principalmente, de donde se expandería al resto de la Península y al centro de Europa.El yacimiento, localizado de forma casual por Elías Rubio Marcos, uno de los componentes de un grupo de arqueólogos y espeleólogos que están realizando un estudio sobre los asentamientos humanos en la provincia de Burgos, se encuentra en una ladera próxima a la capital y cerca del río. Su extensión es de unos 15.000 metros cuadrados y se halla a cuatro metros de profundidad. Hasta ahora se han encontrado restos de hogares, lo que a su juicio denota un asentamiento, y varias piezas de cerámica ornamentadas, entre las que destaca un gran vaso de unos 30 centímetros de diámetro que se halla completo en un 60%. La decoración de estas cerámicas guarda, según el arqueólogo José Luis de Uribarri, un gran parecido con las halladas en la cueva de Somaén, en Soria, que son las más antiguas que se conocen de esta cultura, sobre el 2.600 antes de Cristo.

Si el análisis estratigráfico y la prueba del carbono 14 confirmasen la coincidencia cronológica de estos restos con los de Somaén, se podría precisar, según Jesús María Martínez, otro de los descubridores, el origen de esta cultura y la importancia de Burgos como vehículo transmisor.

En ese sentido, el mencionado estudio que se está realizando sobre 33 yacimientos de distintas épocas arroja ya suficientes indicios de que Burgos, por su posición estratégica, ha servido como correa de transmisión de diversas culturas, a las que en algunos casos ha introducido innovaciones peculiares.

Los hallazgos arqueológicos de cultura campaniforme en la provincia de Burgos no son nuevos; anteriormente se habían detectado en Atapuerca y otros lugares, pero siempre se trataba de enterramientos aislados en cuevas, y no de un poblado de estas características.

La cultura del vaso campaniforme, perteneciente a los albores de la época megalítica, es, según José Luis de Uribarri, innovadora y revolucionaria, caracterizándose por el uso de una serie de elementos típicos tales como la cazuela, el cuenco y el vaso campaniforme, todo ello profusamente decorado; el brazalete de arquero, la espada de cobre y una jabalina, también de cobre, rematada en lo que se denomina punta palmela.