Doble homenaje a Rafael Alberti en Francia

Rafael Alberti, el poeta andaluz, recibió ayer las insignias francesas de comendador de las Artes y las Letras, que le fueron impuestas por el ministro galo de Cultura, Jack Lang. Así culminó el doble homenaje de este país a Alberti, que en el último fin de semana obtuvo también el título de doctor honoris causa por la universidad de Toulouse.

"Acogerle hoy es tanto como filtrar aquí la brisa del mar, de ese mar que, cerca de Cádiz, le vio nacer en 1902". Así comenzó el ministro Lang el breve discurso que precedió a la imposición a Alberti de las insignias de comendador de las Artes y las Letras, en un salón del Ministerio de la Cultura francés, ante medio centenar de personas, entre las que figuraban el poeta galo Jean Cassou, los pintores Orlando Pelayo y Antonio Saura, el cantante Paco Ibáñez y varios representantes de las autoridades francesas y españolas.Alberti llegó a primera hora de la tarde de ayer de Toulouse donde se ha celebrado una semana dedicada a su obra, re matada con la concesión del título de doctor honoris causa.

"Me emociona esta primavera, cuyos primeros días están dedicados a mí", dijo el poeta, que se extendió sobre sus lazos con Francia: "Cassou fue el pri mero que, cuando yo tenía 22 años, se interesó por mi poe sía". Alberti, al concluir el acto no resistió la tentación de recitar un poema que había dedica do a Cassou en señal de agra decimiento en aquella época: "Llévame, viento andaluz, a casa de Jean Cassou...'.

De Louis Aragon, el poeta francés, también comunista, fallecido el pasado mes de di ciembre, recordó que "era mi hermano". Las condecoraciones "no añaden nada a la poe sía, pero cuando uno está vivo, como yo lo estoy, representan un estímulo. Es un reconocimiento que le puede dar con fianza a uno". Alguien le pregunto si, "en este momento, se considera usted representante de los poetas españoles", y contestó: "Muchos poetas no querrán que yo los represente, claro, pero otros muchos, sí". ¿Espera ahora el Premio Nobel?": "Ya fui propuesto una vez y no me lo dieron. Este precedente ya hace más difícil el futuro".

Sobre los galardones literarios comentó: "No creo en la literatura de los premios, y al paso que vamos, un día ya no se estudiará la literatura, sino los premios". Declaró que no seguía muy de cerca la evolución de la política cultural de los socialistas, pero convino que "Francia, de todas maneras, siempre ha acertado en materia cultural".

Piropos al ministro

De pie sobre un pequeño estrado, Alberti, al lado de Lang y Cassou, reiteró su emoción cuando lefueron impuestas las insignias, para terminar piropeando al ministro cuando le aseguró que, "a pesar de pertenecer al Gobierno galo, tiene usted pinta de gitano". Cassou intervino para reafirmar que "éste es el más bello halago que podrían hacerle a usted", y Lang consintió con gran satisfacción aparente la metáfora del poeta. El ministro tras ofrecerle las insignias, le dijo: "Permítame soñar que, con usted, honro también, en nombre de la Francia socialista, a los desaparecidos de aquella generación del 27 que despertó a la poesía española: Lorca, Machado, Jiménez, y también, naturalmente, Jorge Guillén, a quien espero saludar próximamente".