_
_
_
_

El Kremlin espera con desconfianza las nuevas propuestas dela Casa Blanca

El Kremlin sigue a la espera de nuevas propuestas de Washington en las conversaciones de Ginebra sobre el arsenal nuclear en Europa, si bien desconfía profundamente de la sinceridad de la Casa Blanca. En un artículo publicado ayer en Pravda, el académico Georgui Arbatov, presidente del Instituto Soviético de América del Norte, mostraba las reticencias de Moscú al respecto. Si se trata de igualar el nivel de armamentos nucleares entre ambos bloques, argumentó Arbatov, no tendríamos sólo que añadir nuevos misiles en Europa, sino desplegar otros cerca de las fronteras de Estados Unidos una vez que se instalen los euromisiles.Cuando éstos sean desplegados, afirmaba también, se habrán socavado las bases del diálogo sobre armas nucleares y "sería dificil imaginar" cómo podría alcanzarse un acuerdo sobre arsenal estratégico, ya que si los americanos añaden "cientos de cohetes capaces de alcanzar el territorio soviético", estos cohetes serán considerados por la URSS como estratégicos.

Opinión soviética

"Mucha gente", afirmó, "está esperando ahora nuevos pasos de Washington. En particular, se rumorea que pronto se pondrán sobre la mesa nuevas propuestas intermedias. Pero", agregó, "según lo que se dice sobre ellas, no serán, una vez más, nada más que intentos propagandísticos" con los que encubrir los deseos de Washington de instalar sus cohetes de alcance medio en Europa.

Arbatov dijo que las propuestas norteamericanas están destinadas exclusivamente a impresionar al público mal informado, ya que Washington sabe que son inaceptables para la URSS. La opción cero, añadía, es cero sólo para la URSS y no para la OTAN, ya que no contabiliza los misiles británicos y franceses.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Carrera de armamentos

Arbatov concluyó afirmando que Moscú estaría siempre dispuesto a llegar a un acuerdo de desarme con Estados Unidos, si bien Washington "no será nunca capaz" de hacer que la URSS rubrique la política norteamericana a favor de la "carrera de armamentos y el agravamiento de las tensiones".

En círculos occidentales de Moscú se destacaba ayer cómo el artículo de Arbatov ha aparecido en Pravda justo cuando algunos países europeos piden a Washington la reconsideración de su opción cero. En los mismos círculos se afirma también que el Kremlin no parece dispuesto a alterar sus posiciones respecto al desarme, a pesar de la victoria conservadora en la RFA.

Aunque cada vez queda menos tiempo para que, a finales de este año, comiencen a instalarse los euromisiles, la URSS continúa en el debate con firmeza y parsimonia, sin transparentar síntoma alguno de precipitación: para Moscú, el balón sigue estando en el campo norteamericano y Washington será quien deba avanzar nuevas propuestas sobre el desarme en Europa.

El jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas soviéticas, mariscal Nicolai Ogarkov, advirtió ayer, por su parte, en una entrevista publicada por el diario norteamericano The New York Times, que "si Estados Unidos utiliza los euromisiles contra la Unión Soviética, no es lógico creer que nosotros no respondamos más que contra Europa".

El mariscal Ogarkov aseguró que "sería imposible mantener una guerra nuclear limitada". "Esa guerra", añadió, "degeneraría inevitablemente en una guerra total". El jefe del Estado Mayor soviético reconoció que los misiles intercontinentales de la URSS con base en tierra son a largo plazo vulnerables.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_