_
_
_
_
_

El desacuerdo sobre revisión salarial paraliza las negociaciones entre el Gobierno y los funcionarios

., La negativa del Gobierno a incluir cláusula de revisión salarial mantuvo ayer estancadas las negociaciones sobre los sueldos de los funcionarios para 1983, que continuarán la próxima semana. Para encontrar con urgencia una salida, los tres sindicatos participantes presentaron una plataforma común, y los representantes de la Administración quedaron en contestar como máximo el próximo miércoles.

Durante las tres horas de reunión, los portavoces del Gobierno permanecieron inflexibles, con el argumento que aceptar la revisión -principal fuente de pérdida del poder adquisitivo de los funcionarios durante los últimos años- supondría admitir que se relega el objetivo de rebajar al 12% el aumento de los precios al consumo.Por su parte, los sindicatos insistieron en que no están dispuestos a ceder en el principio de la revisión, pero sí en la forma de aplicarla. Después de un receso y de plantear su plataforma conjunta para encontrar una salida general a las negociaciones, la Administración apuntó al final la posibilidad de incluir en los Presupuestos del Estado para 1984 alguna partida para la revisión. Pero la sugerencia fue considerada imprecisa por los sindicatos.

Excepto en materia de trienios y de dieta, la posición conjunta adoptada por la Unión General de Trabajadores (UGT), Comisiones Obreras (CC OO) y Confederación Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) coincidió en urgir la definición final del Gobierno sobre masa salarial, con el fin de negociar sobre la misma ocho puntos. Los representantes del Gobierno dijo que les citarían para responder, como muy tardé, el miércoles.

Según estos ocho puntos, las homologaciones por compromisos que adquirió el anterior Gobierno, una vez concretadas con precisión, deben sumarse como base ala masa salarial. Ello permitiría definir la masa a la que se aplicaría el 12% de subida prometido.

Los sindicatos, que han abandonado la pretensión de recuperar toda la revisión salarial de 1982, defendida en principio por CC OO y CSIF, desean también que se fije un tope mínimo para las pensiones de los pasivos y que se cree un fondo de compensación para que puedan empezar a cobrar al mes siguiente de jubilarse, no cuatro o cinco meses después, como ahora.

El cuarto punto pide que a los contratados administrativos se les garantice el 90% del sueldo de los fijos. Ahora su sueldo está aproximadamente en un 50%. Otra reivindicación conjunta es que se suprima de la Ley de Presupuestos la exigencia de informe preceptivo de Hacienda para aprobar los convenios del personal laboral.

El sexto punto, el de mayor trascendencia sobre el sistema actual, propone el nuevo esquema retributivo, que consistiría en absorber en el salario base media docena de conceptos y sumarle un complemento al puesto de trabajo. Este tendría dos valores: el general y el que primaría la mayor responsabilidad o dedicación. Cada sindicato propone unas tablas para el nuevo sistema, todas coincidentes en los tres pilares, salvo la de CC OO, que desea mantener el concepto de grado.

Dentro del mismo punto, UGT y CC OO pretenden que se ponga un tope de trece a los trienios (es decir, a partir de los 39 años de servicio). La CSIF está en contra de este máximo. También CSIF se opone a que se refundan los seis grupos de dietas en tres, para tener un abanico de 1 a 2,5. Los tres están de acuerdo en que se extienda a los funcionarios el criterio del Estatuto de los Trabajadores sobre horas extras (75% del salario hora).

El séptimo punto solicita que se aplique el pago de trienios por servicios prestados, reconocido hace dos años por ley. Por último, el punto octavo insiste en la flexibilidad de los sindicatos para alcanzar el objetivo de la cláusula de revisión salarial.

Mesas sectoriales

Sobre la masa salarial que se fije, incrementada en el 12% prometido, las distintas mesas sectoriales constituidas o en vías de constitución estudiarían el reparto. No obstante, la mesa general intentará sacar del aumento la elevación de todas las pagas extraordinarias al cien por cien del salario y el complemento de destino para todos. Como la repercusión de ambos conceptos en el primer año supondría respectivamente 4,5 puntos y un punto del incremento, según las primeras estimaciones, intentarán escalonarlo durante dos o tres ejercicios.La falta de concreción de la masa salarial ha obstaculizado el trabajo de las mesas sectoriales puestas en marcha. En la de Seguridad Social se han presentado otros problemas, como el efecto de las homologaciones pendientes y el efecto de la unificación de jornada. En la de los funcionarios docentes, a la que no han sido admitidas la CNT y la Intersindical gallega, los primeros problemas han consistido en la representatividad.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_