El Ministerio de Hacienda prevé un déficit presupuestario del Estado para 1982 de 831.000 millones de pesetas

El Ministerio de Hacienda prevé un déficit del Estado a final de año de 831.286 millones de pesetas, según expone el Presupuesto monetario de 1982, que ya obra en poder de la comisión de transferencias del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), formada por Francisco Fernández Marugán y Julián Campo. El desglose de este déficit proviene de una diferencia entre los ingresos y gastos presupuestarios de 692.000 millones de pesetas, unas operaciones extrapresupuestarias negativas de 117.000 millones y otras cuentas del Tesoro, también negativas, de 22.286 millones. La diferencia entre esta previsión y el déficit del pasado ejercicio es de 326.715 millones de pesetas.

Según estas previsiones, los ingresos presupuestarios serán de 2.888.500 millones, en los que se ha incluido la recaudación proveniente de los impuestos cedidos a la Generalitat de Cataluña. Los pagos serán de 3.580.500 millones, y se incluyen los que deberían haber realizado por cuenta de la Generalitat de no haberse efectuado la transferencia de competencias.Según algunas fuentes consultadas, en estas cifras no se incluyen algunos créditos extraordinarios otorgados como anticipos de tesorería por valor de alrededor de 240.000 millones de pesetas. Existen créditos extraordinarios que pasan de un ejercicio a otro. Los que habrían pasado de 1981 al actual ejercicio tendrían un valor de unos 100.000 millones, por lo que existe una diferencia de 140.000 millones, a los que habría que añadir otros agujeros, en el capítulo de corporaciones locales, por unos 40.000 millones, y de la Seguridad Social, por unos 20.000 millones. "De esta forma", declararon las mismas fuentes, "las necesidades financieras del sector público durante el año en curso habrán sido de más de un billón de pesetas, lo que supone alrededor de un 5% del producto interior bruto".

Otros expertos consultados, vinculados al sector empresarial, afirman que la inercia del déficit para 1983 lo situaría en 1,3 billones de pesetas, y que es tarea del próximo Gobiemo recuperar el control de estas cifras. "Se debe aclarar qué porcentaje del producto interior bruto es el que hay que soportar, sea el que sea, aun que naturalmente nosotros creamos que debe ser el más pequeño posible. Lo que no puede ocurrir es que no se asimile como prioritario el control de esta magnitud, como parece que ha ocurrido hasta ahora. Es necesario dar un frenazo y establecer los controles oportunos a medio plazo. Mientras esos controles no existan, la magnitud del déficit de penderá en buena parte de la personalidad del subsecretario o del secretario de Estado que funcione, que deberá actuar a cara de perro, cortando de todos los capítulos que sea posible".

Las previsiones de 1983

Según algunos funcionarios del Ministerio de Hacienda, el equipo de García Añoveros también habrá realizado una previsión del déficit para 1983 situada en alrededor de 900.000 millones de pesetas. Ello se conseguiría con un incremento de los ingresos presupuestarios, tocando algunos impuestos, por valor de 50.000 millones de pesetas, y una reducción de los gastos, recortando algunos programas, por 150.000 millones de pesetas.

Respecto a los diez primeros meses del año en curso, el déficit del Estado ascendió a 785.237 millones de pesetas. El déficit presupuestario en el mismo periodo fue de 700.377 millones, consecuencia de unos ingresos totalells de 2.029.907 millones y de unos pagos de 2.730.284 millones. El desglose de ingresos por impuestos directos fue el siguiente: impuesto sobre la renta de las personas físicas, 633.540 millones; impuesto sobre sociedades, 186.933 millones; impuesto sobre sucesiones, 14.895 millones; impuesto sobre el patrimonio, 16.228 millones; derechos pasivos, 12.911 millones, y otros, 9.090 millones.

Las cifras más significativas de la imposición indirecta corresponden al tráfico de empresas (189.398 millones), impuestos especiales (188.123 millones), aduanas (202.691 millones) e impuesto sobre el lujo (137.186 millones).

La apelación del Estado al Banco de España ascendió a 665.325 millones y, más concretamente, la apelación del sector público fue de 631.638 millones en el mismo intervalo de tiempo. Las previsiones de recurso total del sector público al Banco de España para el conjunto de 1982, según el Presupuesto monetario elaborado por el Ministerio de Hacienda, será de 651.686 millones de pesetas, distribuidos del siguiente modo: Estado, 573.686 millones; crédito oficial, 145.000 millones; organismos autónomos, 3.000 millones; otros organismos oficiales (créditos a sociedades estatales), 5.000 millones; Seguridad Social, un saldo negativo de 67.000 millones, y las cuentas de tesorería de los entes autonómicos, un saldo negativo de 8.000 millones de pesetas.