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La mayoría de los archivos y bibliotecas mantiene estructuras del siglo XIX

La mayor parte de los archivos y las bibliotecas españolas mantiene todavía estructuras del siglo XIX Esta es una de las preocupaciones manifestadas en el I Congreso Nacional de Archiveros y Bibliotecarios de la Administración Local que se inauguró el lunes, día 22, en las instalaciones del complejo cultural San José de Elche.

A este congreso, que se prolongará hasta el próximo sábado, asisten cerca de dos centenares de profesionales, que suponen un 80% de los que desempeñan este trabajo en nuestro país. Un porcentaje de los asistentes, que se acerca a un 15%, son miembros del cuerpo facultativo de archivos y bibliotecas de la Administración Central.

En las sesiones de trabajo del congreso participa igualmente una notable representación de los departamentos de Paleografía y Diplomacia de varias universidades españolas, entre ellas las de Madrid, Barcelona, Valladolid, Granada y Alicante.

Rafael Navarro, archivero del Ayuntamiento de Elche, por cuya iniciativa se desarrolla este congreso, manifestó a este periódico que las bases del mismo son, por una parte, el evidente descontento de los profesionales de archivos y bibliotecas, ya que están aislados, sin una estructura adecuada unida a la Administración.

Por otra parte, señala como dato a tener en cuenta el hecho de que la autonomía municipal, paradójicamente, no ha reforzado aún el papel cultural de estos profesionales, que se ven sujetos a una estructura del siglo XIX que no refleja el sentido cultural de su trabajo.

'Encargados de bibliotecas'

En cuanto a los bibliotecarios, en opinión de los responsables de la organización del congreso, los problemas son más evidentes: "Los ayuntamientos no tienen obligación de crear bibliotecas. La actual legislación contempla a los bibliotecarios locales con la figura de encargados de biblioteca. La estructura, además, es no sólo caótica sino inservible, opuesta a la que se crea con la industrialización".El congreso, pues, debe servir para ofrecer alternativas a los proyectos de ley que actualmente funcionan y que, en el caso de las bibliotecas, éstas se conviertan en entidades con repercusión social, evitando que las bibliotecas, en palabras de Rafael Navarro, sean "un maquillaje de lujo cultural" y que el bibliotecario se convierta en el gestor cultural de un municipio.

Colaboración ministerial

En la organización de este I Congreso Nacional de Archiveros y Bibliotecarios destaca la colaboración de los ministerios de Administración Territorial y de Cultura, la Universidad de Alicante, el decano de cuya facultad de Filosofía y Letras inauguró las sesiones el lunes, la Consejería de Cultura del País Valenciano y la propia Asociación Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas (ANABAD).Mientras en Elche comenzaba este congreso de bibliotecarios y archiveros de la Administración Local, en Madrid se inauguró el lunes pasado, día 22, la primera conferencia sobre desarrollo de los servicios archivísticos en Iberoamérica, que se clausura hoy.

Esta conferencia, patrocinada por el Ministerio de Cultura y por la Asociación Latinoamericana de Archivos, ha sido convocada con el objetivo de redactar un plan general de desarrollo de los archivos latinoamericanos y coordinarlos con los proyectos de la Unesco y de la Organización de Estados Americanos (OEA). Los asistentes estudiarán los problemas de la documentación colonial española y portuguesa y, en general, los problemas del patrimonio archivístico latinoamericano.

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