El empleo, la ecología y la paz, temas clave de la estrategia electoral socialista

La protección del medio ambiente, segunda consigna electoral del Partido Socialista austriaco (SPOE), trata de sintonizar con la creciente preocupación ecologista que, aunque en menor medida que en la República Federal de Alemania, se extiende entre todos los jóvenes. Una estricta normativa ha conseguido mantener unos niveles de contaminación ambiental muy bajos en la naturaleza. No en vano el turismo del. país depende de los aires puros de las montañas y de las aguas cristalinas de lagos y ríos.Zwentendorf, la única central nuclear de Austria, paralizada por un referéndum popular en 1978 no será un tenía electoral, aunque la oposición conservadora lo utilice para jugar a los verdes. El SPOE, que defendió la puesta en funcionamiento de Zwentendorf (Kreisky comprometió su puesto en ello), resucitará probablemente el tema si gana las elecciones Mientras tanto, Zwentendorf lucha contra el óxido y el polvo en espera de mejores tiempos para la energía nuclear en Austria.

El contagio ecologista

La preocupación ecológica ha contagiado especialmente a las juventudes socialistas, que, junto con los elementos históricos y ortodoxos del partido, se han convertido en los defensores de los valores morales del socialismo ante la relajación de una parte de la directiva socialista, establecida y, conservadora tras doce años de poder.

Los jóvenes socialistas se han opuesto a la exportación de armas a países que violan los derechos humanos, y el jefe de los jusos, Josef Cap, ha pedido recientemente explicaciones públicas al dirigente Theodor Kery, máxima autoridad en la región del Burgenland. Los privilegios de Kery, entre ellos acumulación de sueldos y corriente eléctrica a precio rebajado, han servido de detonante a una intensa discusión dentro del partido tras ser denunciados por la Prensa.

La limpieza de imagen de los socialistas preocupa extraordinariamente a Kreisky y causó en 1980 la retirada del ministro de Finanzas, Hannes Androsch, tras el asunto del Hospital General de Viena. Doce personas fueron procesadas en este asunto y han sido condenadas ya en parte a penas de hasta nueve años de prisión (diez años de cárcel y quince en caso de reincidencia son las máximas penas para delitos económicos, por los cuales fueron condenadas 960 personas en 1980).

Diálogo con la Iglesia

Sin llegar al síndrome polaco, los domingos los templos se llenan de fieles en Austria, donde el 88% de la población es católica.

Un clima de diálogo, enturbiado de cuando en cuando por un berrinche, caracteriza las relaciones entre la jerarquía de la Iglesia católica que dirige el cardenal primado, Franz Koening, y los dirigentes socialdemócratas de Austria.

El motivo de fricción más importante entre Iglesia y SPOE ha sido la despenalización del aborto en el marco de una reforma del Código Penal (1975). A través de varias organizaciones, la Iglesia milita activamente contra el aborto (cubierto por la Seguridad Social sólo si existen poderosas razones de salud), que puede realizarse libremente dentro de los tres primeros meses de embarazo si se encuentra un médico o un centro hospitalario dispuesto a ello.

-Mientras en Viena es posible abortar sin dificultad por unos 3.000 chelines (18.000 pesetas), en muchas zonas del país no existen clínicas donde se practiquen abortos por falta de consentimiento del personal. Los abortos en consultas privadas constituyen, con todo, un pingüe beneficio para médicos poco escrupulosos.

Al margen del aborto, la Iglesia católica disfruta de una posición privilegiada en la enseñanza. El Estado corre con todos los gastos de personal en las escuelas católicas privadas mediante el impuesto religioso (un 0,5% del sueldo como promedio), la presencia del crucifijo en, las aulas está reglamentada, los libros de religión -gratuitos, como todos los libros escolares- están subvencionados por el Estado y la Iglesia imparte las clases de religión católica en la escuela pública. La religión es materia obligatoria (cada uno según su confesión), a no ser que se solicite la exención.

Un lugar en el mundo

La activa política internacional protagonizada por Kreisky, antiguo ministro del Exterior, no goza de la comprensión de todos sus compatriotas, una parte de los cuales se sienten como hijos abandonados de un padre a quien se le ha quedado pequeño el hogar.

Austria, que recuperó su soberanía en 1955 a cambio de su neutralidad política, tiene buenas relaciones con los países occidentales y el Este, con quien mantiene un activo intercambio comercial. Los préstamos de Austria a la URS S y la actitud hacia la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) han valido al Gobierno Kreisky críticas por parte de la Administración estadounidense.

Kreisky, sin embargo, practica una política independiente de los bloques, ha condenado enérgicamente la intervención soviética en Afganistán, ha criticado las sanciones económicas de EE UU contra Polonia y el Este y, judío como es, ha arremetido con dureza contra la política del Gobierno israelí de Beguin.

Austria es un amigo leal de EE UU, pero no va a decir sí y amén a todo lo que allí se diga y se piense, ha subrayado Kreisky, para quien las relaciones entre Austria y la URS S son un ejemplo modelo de la política de distensión en el momento actual.