Especialistas en temas judíos, musulmanes y cristianos estudian las raíces comunes

En ausencia de los profesores árabes invitados, se clausuró ayer en Toledo el primer Diálogo de las Tres Culturas que históricamente convivieron en la que fuera capital de España. Especialistas en las culturas árabe, cristiana y judía discutieron en estos encuentros temas que abarcaron desde la historia y las raíces comunes hasta el futuro de la convivencia entre los pueblos seguidores de las tres religiones monoteístas, en un congreso que se inauguró el pasado domingo y que se ha celebrado en San Juan de la Penitencia, el antiguo convento, hoy restaurado y convertido en centro cultural, que mantiene en Toledo la Fundación Ortega y Gasset.

El encuentro tenía como finalidad "la extensión de la realidad de estas tres culturas, y sus interrelaciones para romper la ignorancia que es fuente de los prejuicios que contribuyen a su no entendimiento".Sobre el conjunto de temas a discutir planeó todo el tiempo el actual conflicto entre los países árabes del Oriente Próximo e Israel, y más desde que los profesores de los países árabes rehusaron asistir, en el último momento, precisamente aludiendo a la connivencia entre cristianos y judíos en el problema de Líbano. Los intereses y las realidades de la cultura islámica fueron defendidos por arabistas españoles, especialmente los profesores de las Universidades de Granada y Salamanca, y, de la misma manera que las otras dos culturas, por escritores y profesores españoles e israelíes, además de otros venidos de universidades de América del Norte y del Sur y de Europa.

El encuentro ha tenido dos vertientes fundamentales: una, la presentación de trabajos de investigación de tipo historiográfico y literario, casi todos sobre las raíces comunes de las tres culturas en España, o sobre aspectos de cada una de ellas que contribuyen a su esclarecimiento.

Al ritmo de doce comunicaciones y un coloquio diario, desfilaron por el encuentro profesores como Haim Beinart, Miguel Angel Ladero, Salomón Shimonsohn, Eloy Benito, José Luis Lacave, Carlos Carrete, Francisco Marcos Marín, Mikel Epalza, Joaquina Albarracín, Manuel Villar Gil (que dio una de las conferencias más espectaculares, sobre la alquimia andalusí), Felipe Maíllo, Ramón Gonzálvez, Fernando Jiménez de Gregorio, Said Al-Ashmawy (profesor de la Universidad de Nueva Jersey, Estados Unidos), Ricardo Izquierdo, Juan Francisco Rivera, José Carlos Gómez Menor, Fernando Díaz Esteban, Jehosua Blau, Angel Sáenz-Badillos, Colette Sirat (de la Sorbona de París), José Antonio G.-Junceda, Yoel Kremer, Israel Levin (ambos de la Universidad de Tel Aviv), Emilio de Santiago, Aviva Doron, Jacob Hassan, Fernando Valderrama, Juan Martínez Ruiz, Luis Suárez Fernández, Enmanuel Sivan, Montserrat Abumalán (de la Complutense de Madrid), Shelomo Ben-Ami (de la Universidad de Tel Aviv), Ron Barkai (de la misma universidad), y Moisés Orfali.

Desde la noticia sobre la economía de una aljama determinada a la huella de las tres culturas en los manuscritos árabes y aljamiados de Ocaña, pasando por la plasmación en el derecho del estatuto jurídico de las tres culturas en la ciudad tolerante de Toledo, o por el estudio de los ochocientos años de capitalidad mozárabe de Toledo o la presencia de los sirios en España, este aspecto del encuentro, altamente especializado, ocupaba la mayor parte de la jornada de trabajo, que se completó con sesiones musicales y artísticas, que también relacionaban las tres culturas. como conciertos de flamenco toledano y extremeño.

En este sentido, la mesa redonda de escritores y periodistas, en la que participaron, además de Muricio Hatchuel Toledano, presidente de la Federación Sefardita, los escritores Leopoldo Azancot y Marcos Ricardo Barnatán, y los periodistas Marisa Ciriza y Juan Fernández Figueroa, planteó el problema de los intelectuales actuales contra el racismo y por la ruptura de los prejuicios, derivados, sobre todo, de la ignorancia.