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Campaña de las cámaras agrarias contra el consumo de productos franceses

La Cámara Agraria Provincial y el Consejo Regional de Murcia emprendieron ayer una campaña contra el consumo de productos franceses, con objeto de denunciar ante la opinión pública la quema de camiones y la pérdida de frutas y hortalizas que en ellos se transportan, por causa de la acción de los franceses en la frontera y en la región del Midi francés.

Con la edición de 15.000 carteles y 50.000 pegatinas, las instituciones murcianas denuncian la agresión que sufren periódicamente, desde hace tres años, las frutas españolas que se transportan por carretera a los mercados europeos."Los productos de nuestra tierra los cultiva amorosamente el agricultor, los transporta diligentemente el camionero y los quema airadamente el francés. ¿Productos franceses? No, gracias". Este es el lema del cartel, que muestra en varias viñetas lo que ocurre con algunos productos españoles cuando pasan la frontera con Francia. "Queremos sensibilizar a la opinión pública española, y también a la francesa, de lo que nos está pasando", dijo ayer en una conferencia de Prensa Fernando Sanz Pastor, presidente de la Cámara Agraria de Murcia y, hasta el jueves pasado, consejero de Transportes y Comercio del ente preautonómico murciano.

La campaña contra los productos franceses está apoyada, por lo pronto, por otras quince cámaras agrarias, la mayoría de la costa mediterránea, y también han manifestado su apoyo las de Cáceres, Asturias y Toledo. La iniciativa de los representantes de los agricultores españoles, ante la violencia francesa", se inició el pasado mes de enero con una moción de Sanz Pastor en la que se pedía al pueblo de Murcia "que abandone el consumo de productos o materiales franceses".

"Realmente, nosotros no confiamos en un boicoteo efectivo de todo lo que venga de Francia, entre otras cosas porque consumimos, sobre todo, productos franceses lujosos: quesos, vestidos y perfumes", puntualizó el presidente de la cámara agraria murciana, que estuvo al frente, durante cuatro años, de la Federación de Agricultores Jóvenes. "El objetivo de la campaña que promuevo, y de la que me responsabilizo", dice Sanz Pastor, "persigue la sensibilización de la opinión pública, del Gobierno y de las autoridades y pueblo de Francia".

El lanzamiento de los carteles contra las acciones francesas coincide con la campaña que los agricultores del país vecino emprenden todos los años, por estas fechas, contra las frutas y hortalizas españolas. Hace escasamente dos semanas que fueron quemados en la frontera diez camiones españoles. Las pérdidas se calculan en seiscientos millones de pesetas.

"No nos preocupa esta cifra, que al fin y al cabo pagan, sino los 3.000 millones de pesetas que estimamos se: han perdido en los dos últimos años, al no poder cubrir los pedidos contratados en Europa". Esta cifra, según el promotor de la campaña, corresponde a las pérdidas globales, si se suman todos los días en que ha estado cerrada la frontera con Francia, a la altura de Perpignan, durante los dos últimos años.

Para Sanz Pastor, no obstante, los perjuicios que causan las acciones de los agricultores franceses son, a la larga, más cuantiosos, "ya que han hundido el mercado interior en varias ocasiones". El rechazo de algunos productos, que se exportan en un 75% de su producción total, ha hecho bajar los precios interiores, produciendo pérdidas totales de alrededor de 15.000 millones de pesetas.

"Nosotros no tenemos una postura agresiva ante la actitud del campesino francés, añadió. Estamos con él en su postura de solicitar una revisión de la política agraria de la CEE, que margina los productos del Mediterráneo".

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