General Sharon: "Hemos alcanzado todos los objetivos fijados y estamos listos para negociar con Siria
"Israel ha decidido detener los combates porque hemos alcanzado todos los objetivos fijados. Estamos listos para iniciar negociaciones con Siria sobre un nuevo acuerdo de alto el fuego, pero no con los terroristas de la OLP", ha declarado ayer el ministro israelí de Defensa, Ariel Sharon, en una conferencia de Prensa en Tel Aviv.
¿Cuáles eran estos objetivos? "Crear una zona de seguridad de cuarenta o 45 kilómetros de profundidad que liberase a nuestras localidades fronterizas en Galilea de la amenaza terrorista. Esto se ha hecho. Nuestras ciudades y pueblos en el norte ya no serán más rehenes de los terroristas palestinos".La sala donde se desarrolla la conferencia de Prensa, en el Ministerio de Defensa, sólo está llena a medias. No hay el clima de los "grandes días", a lo Dayan, tras la guerra de junio de 1967. Los esfuerzos de Ariel Sharon para presentar el resultado de esta campaña como una "victoria brillante y ejemplar", conseguida en condiciones "particularmente difíciles", no logran convencer.
Un corresponsal norteamericano murmura: "Después de todo, es la victoria del Goliat israelí contra el David palestino". Sharon habla de la capacidad del nuevo carro de combate Merkava, fabricado en Israel, contra los T-72 sirlos. "El T-72 tiene fama de ser el mejor tanque del mundo. Nuestros Merkava destruyeron nueve el viernes por la mañana", afirma el ministro de Defensa, que menciona también las decenas de Mig 21 y Mig 23 sirios abatidos por la aviación israell y, sobre todo, la destrucción fulgurante de las baterías de misiles Sam-6 en la Bekaa.
Sin duda, y frente a los sirios, el Ejército hebreo ha demostrado una vez más su aplastante superioridad, y esta demostración constituye un arma disuasoria en el futuro. La prueba de fuerza ha puesto también de relieve la superioridad de las armas norteamericanas sobre las soviéticas. Esta es la explicación de que el Pentágono no tuviera mucho interés en que la guerra fuera inmediatamente detenida.
Frente a los combatientes palestinos el Ejército hebreo tenía una superioridad tal (la OLP no dispone de un solo avión de combate y tan sólo de algunos anticuados tanques) que su victoria -costosamente adquirida, de otra parte, al precio de más de cien muertos y seiscientos heridos- difícilmente puede tener cabida en los anales gloriosos de la historia de las guerras.
A la pregunta de un periodista israelí sobre si el ataque contra Líbano ha conseguido romper la columna vertebral de la OLP y aniquilar militarmente a los palestinos, el ministro Sharon responde: "Los terroristas han sufrido terriblemente en esta guerra y les hemos infligido daños en hombres y material que jamás habían tenido. Esto puede cambiar radicalmente el papel de la OLP en el porvenir".
Insiste el informador: %Han conseguido destruir la fuerza militar palestina?". Ariel Sharon está molesto. Su rostro se contrae un instante. Responde: "Les hemos causado tales pérdidas que las sentirán durante mucho, mucho tiempo".
El ministro sigue explicando que su Ejército se ha enfrentado a 15.000 soldados palestinos, organizados en unidades militares estructuradas, y otros 40.000 formando parte de las milicias armadas de la OLP. La OLP disponía de más de quinientas piezas de artillería.
"Desde julio de 1981, fecha del anterior alto el fuego, hemos sufrido veinticinco muertos y trescientos heridos debido a los ataques palestinos organizados desde el territorio libanés. Desde 1968 hasta ahora los terroristas han causado 1.002 muertos y 4.350 heridos en atentados en Israel y en todo el mundo de los que fueron víctimas judíos", añade el general Sharon, que insiste en que la OLP, disparando hacia Galilea, "ha ignorado sistemáticamente los objetivos militares -que son numerosos en esta zona- para alcanzar únicamente blancos civiles".
"Nunca hemos tenido la intención de entrar en Beirut. Si hemos llevado nuestras tropas tan lejos hacia el norte ha sido para amenazar a los sirios, al norte de la Bekaa, expulsándoles del sur. Nuestro objetivo: hacer retroceder a los sirios -y a las unidades terroristas bajo su protección- a una distancia de cuarenta o 45 kilómetros de nuestra frontera. Esto se ha hecho".
"¿Piensa usted que este éxito militar permitirá alcanzar otro de los objetivos israelíes, instaurar con la ayuda de las falanges un 'orden nuevo' en Líbano?", pregunta un corresponsal extranjero.
"Nunca hemos tenido el propósito de instaurar un 'orden nuevo' en Líbano. Esperamos, es verdad, que los libaneses podrán algún día gobernar por sí mismos su país, sin recibir órdenes de Damasco y sin la amenaza terrorista". Resumiendo, se puede concluir que Israel no espera ahora más que un nuevo acuerdo sobre un alto el fuego que debe incluir la creación de una zona-tampón desmilitarizada de cuarenta o 45 kilómetros y que impedirá a los sirios reinstalar sus misiles tierra-aire en la llanura de la Bekaa.
Los otros objetivos, serán probablemente olvidados de momento. Israel quiere eliminar a la OLP de la negociación sobre el alto el fuego, pero como el cuartel general palestino en Beirut permanece intacto no está claro cómo eso va a ser posible. Sobre todo después que un portavoz de la Casa Blanca haya declarado: "deseable" las participación de la OLP en las negociaciones.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.