Inquietud en la RFA ante la manifestación antinuclear convocada para hoy en Bonn

Ante el Parlamento federal (Bundestag), reunido en sesión plenaria ayer en Bonn, el canciller federal, el socialdemócrata Helmut Schmidt, rectificó anteriores tomas de postura y se mostró conciliador ante la manifestación pacifista que tendrá lugar hoy en la capital federal alemana.

Bonn se prepara desde hace días para la mayor manifestación de la historia de la RFA. En los últimos días, las cifras se han disparado y se habla ya de 200.000 manifestantes, que son más de la mitad de los habitantes de la capital federal. Bajo el lema "contra la amenaza atómica, actuación conjunta a favor del desarme y la distensión en Europa", dos organizaciones de la Iglesia protestante convocaron una manifestación para hoy, en Bonn, a la que se han sumado alrededor de 800 grupos en toda la RFA.En una primera reacción hace días, el canciller Schmidt descalificó a todos los manifestantes de una manera global con el apelativo de "compañeros de viaje" que debilitan la posición del Gobierno federal en el país y también internacionalmente.

La división provocada en su propio partido y las dimensiones adquiridas por el movimiento pacifista parecen haber obligado a Schmidt a cambiar de postura.

Ayer en el Bundestag el canciller federal se manifestó de forma más diferenciada y distinguió entre los manifestantes pacifistas cuatro grupos diferentes:

1. "Pacifistas convencidos, que tienen todos mis respetos".

2. "Los que consideran irrenunciable el equilibrio militar entre el Este y el Oeste, pero quieren que ese equilibrio se mantenga al nivel más bajo posible; yo me identifico con este grupo".

3. "Los que quieren renunciar al equilibrio militar y desean un desarme unilateral de Occidente o la República Federal de Alemania. Esta política no crea más seguridad, sino una inseguridad mayor, y no podemos aprobarla".

4. "Una pequeña minoría, que defiende los intereses de otros Estados, los que intentan hacernos creer que los cohetes soviéticos son para la paz y los norteamericanos para la guerra. Con ésos yo no puedo nunca actuar conjuntamente".

El debate parlamentario concluyó con una votación, en la que los diputados de la coalición social-Iiberal (SPD-FDP) rechazaron una resolución democristiana de condena de la manifestación pacifista de hoy en Bonn.

Bloqueo de carreteras

La capital federal espera con inquietud la llegada de los manifestantes. Desde ayer por la tarde, las emisoras de radio advertían ya a los automovilistas que se abstuviesen de aproximarse hoy a Bonn, porque todas las autopistas quedarán completamente bloqueadas y también el centro de la ciudad. La plaza prevista para el mitin final sólo tiene cabida para 100.000 personas y se esperan unas 200.000.Están anunciados 33 trenes especiales, y el número de autobuses preparados aumenta de día en día. El lunes había 2.300; el martes, 2.600, y el miércoles se llegaba a 2.900. Por el Rin navega un barco hacia Bonn lleno de manifestantes.

El portavoz de la policía calificó de "dramático el desarrollo de las cifras en los últimos días. Según mis conocimientos, no se ha dado nunca nada parecido en el sector de reuniones públicas en la historia de nuestra República".

El portavoz policial reconoce que, "a pesar de los esfuerzos conjuntos, está comprobado que los problemas planteados son irresolubles y no podemos prever el alcance de las consecuencias". La policía acudirá sin cascos.