Holanda seguirá vertiendo residuos nucleares frente a la costa de Galicia

El Consejo de Estado de los Países Bajos, el más alto órgano de apelación en este país, ha dictaminado en favor de que prosiga la operación de lanzamiento de residuos nucleares en aguas del Atlántico. Con ello, el Consejo desestima la protesta de dos organizaciones ecologistas que temen una ruptura del equilibrio natural de las aguas marinas como consecuencia del vertido de sustancias atómicas. Green Peace y Naturaleza y Entorno habían denunciado al Ministerio holandés de Sanidad y Medio Ambiente en relación con estas actividades de las industrias nucleares neerlandesas. Según los ecologistas, los residuos atómicos podrían escapar de sus recipientes y contaminar las aguas, con el efecto que podría ello tener en la fauna marina y en los consumidores de pescado. Holanda ha decidido, mediante la resolución del Consejo, que continúe el vertido de residuos «ligeramente radiactivos provenientes de laboratorios y hospitales de Suiza, Holanda, Bélgica y Luxemburgo». Un buque especial neerlandés transportará en lo sucesivo unas cuatrocientas toneladas de desechos nucleares hasta un punto del Atlántico situado a unos 750 kilómetros de Finisterre, para proceder allí a su lanzamiento. Los depósitos quedarán almacenados a una profundidad de unos 4.000 metros. En relación con este tema, cabe recordar que el pasado invierno un buque de guerra holandés, el Tydeman, recorrió aguas cercanas a Canarias en busca de un punto adecuado para cementerio nuclear.

Accidentes nucleares

En relación con el tema nuclear, el Ministerio del Interior de la República Federal de Alemania registró durante el pasado año 201 accidentes técnicos en centrales nucleares. El 53% de ellos tuvo importancia media, mientras que el 3% se consideró muy peligroso.